La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner ha aprovechado el acto de inauguración del Salón de los Pueblos Originarios en la Casa Rosada para anunciar que enviará al Parlamento un proyecto de ley contra el trabajo precario. La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner ha aprovechado el acto de inauguración del Salón de los Pueblos Originarios en la Casa Rosada para anunciar que enviará al Parlamento un proyecto de ley contra el trabajo precario.
Tal y como recoge el diario Clarín, la mandataria ha asegurado que el segundo problema al que se enfrentan los trabajadores argentinos es el trabajo en negro. Fernández ha agregado que la expectativa del proyecto Promoción del Empleo Registrado es “formalizar a 650.000 trabajadores en dos años”.
En su intervención ha comentado también los puntos negativos de tener un trabajo precario y ha adelantado que la iniciativa es eximir de pagar aportes patronales, a todas aquellas microempresas que tengan hasta cinco trabajadores.
Si alguna empresa viola esto, “va a perder los beneficios que recibe del Estado, esto no es ninguna amenaza, es simplemente cuidar los recursos de todos”. Para evitarlo, ha anunciado también la creación del Registro Público de Empleadores con Sanciones Laborales (Repsal), coordinado desde el Ministerio de Trabajo, “para poder articular toda la inmensa cantidad de datos, y cuando detectemos que un empleador ha violado las normas y tiene empleo en negro”.
