El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha adelantado su viaje a Argentina para reunirse con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, con el fin de conocer las intenciones de la mandataria argentina respecto a una posible expropiación de la petrolera argentina YPF. El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha adelantado su viaje a Argentina para reunirse con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, con el fin de conocer las intenciones de la mandataria argentina respecto a una posible expropiación de la petrolera argentina YPF.
Brufau ha dedidido adelantar su visita por el castigo bursátil que está recibiendo la compañía ante los rumores sobre los movimientos con YPF. El empresario probablemente se ha hecho eco de la publicación del diario Página 12, cercano a Fernández, que ha señalado esta semana que el ejecutivo argentino estudia la renacionalización de YPF, que está controlada por Repsol desde el año 1999.
A pesar de que la compañía española posee el 58% de las acciones de la petrolera argentina y el grupo Petersen, propiedad de la familia Eskenazi, tiene en su propiedad otro 25% desde 2008, el Estado de la República de Argentina todavía controla la acción de oro de YPF y una pequeña participación en acciones de la entidad.
El Gobierno de Fernández y las petroleras que operan en el país atraviesan un momento de tensión desde que, el pasado 16 de enero, Argentina acusara a Repsol YPF, Shell, Esso, Petrobras y Oil de aplicar supuestos sobreprecios durante la venta de gasoil a las empresas de transporte de cargas y pasajeros.
El ejecutivo argentino denunció que las empresas cobran el gasoil a granel un 8,4% más caro que el que se comercializa en los surtidores, lo que genera una distorsión que alcanzaría a 3.500 millones de pesos argentinos anuales (unos 620 millones de euros).
A este respecto la antigua compañía estatal YPF, emitió un comunicado dos días después, en el que rechazaba las acusaciones que había realizado contra ellos el gobierno.
Brufau tendrá que lidiar ahora contra este problema en Argentina, tras haber logrado que se disolviera el acuerdo entre la constructora Sacyr Vallermoso y la petrolera Pemex, para controlar Repsol.
