Brasil, uno de los principales productores de trigo, podría reducir sus exportaciones y destinar parte de su producción al mercado interno al no poder mantener el mismo ritmo de compras a dos de sus grandes suministradores. El descenso en la producción del cereal en Argentina y las limitaciones a las importaciones de envíos de EEUU, que se han visto perjudicadas por varios cargamentos contaminados, podrían obligar al país presidido por Lula da Silva a cambiar su estrategia en el comercio de este producto. Brasil, uno de los principales productores de trigo, podría reducir sus exportaciones y destinar parte de su producción al mercado interno al no poder mantener el mismo ritmo de compras a dos de sus grandes suministradores. El descenso en la producción del cereal en Argentina y las limitaciones a las importaciones de envíos de EEUU, que se han visto perjudicadas por varios cargamentos contaminados, podrían obligar al país presidido por Lula da Silva a cambiar su estrategia en el comercio de este producto.
Las medidas adoptadas para las importaciones estadounidenses han surgido tras colocar en cuarentena un cargamento de trigo de este país tras una denuncia de que podría estar contaminado con vomitoxina. La vomitoxina es un subproducto del hongo fusarium que tiende a prosperar en clima lluvioso y húmedo, y es una toxina vegetal que puede generar enfermedades en seres humanos y en el ganado al ser consumida en grandes cantidades.
El Ministerio de Agricultura brasileño informó que descargará el envío en silos ubicados en el puerto de Santos para realizarle pruebas. El cargamento será liberado si los análisis comprueban que el trigo está dentro de los estándares establecidos, dijo Maçao Tadano, director del Departamento de Inspección de Productos de Origen Vegetal del Ministerio. «El análisis deben durar de 5 a 7 días. Sólo después de que el resultado diga que todo está bien, el trigo será liberado al importador», dijo Tadano a la agencia Reuters.
Brasil compra regularmente trigo a EEUU, el mayor exportador mundial del cereal, especialmente cuando Argentina, cuyo producto llega exento de tasas, no logra atender a todas las necesidades del mercado brasileño debido a que en la actualidad destina más recursos a producir soja.
El Ministerio de Agricultura carioca estima que han desembarcado 107.000 toneladas de trigo estadounidense en el 2009, de un total de 4,1 millones de toneladas importadas desde diferentes países entre enero y agosto.
Durante el año comercial 2008/2009, EEUU exportó 27,6 millones de toneladas métricas de trigo, que corresponde al 41% de lo que ese país produjo esa temporada, según US Wheat, la asociación que reúne a exportadores del cereal estadounidenses.
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