La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ha firmado los primeros proyectos de ley que conformen su reforma educativa. La propia mandataria ha asegurado que se trata del plan “más significativo de Chile en los últimos 50 años”. La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ha firmado los primeros proyectos de ley que conformen su reforma educativa. La propia mandataria ha asegurado que se trata del plan “más significativo de Chile en los últimos 50 años”.
En concreto, como comenta el diario El País, Bachelet ha manifestado en el Palacio de la Moneda que están cumpliendo con sus promesas: “iniciar un proceso que permita asegurar calidad, gratuidad y acceso a la educación”.
Del plan se han enviado tres proyectos, que serán discutidos en el Parlamento.Uno que prohibirá que las instituciones educativas que reciben financiamiento público apliquen mecanismos de selección de estudiantes, un segundo para evitar (de modo gradual) que los padres tengan que pagar por la educación de sus hijos y por último uno que consiga que en Chile nadie se lucre con la educación.
La mandataria cuenta con la mayoría de votos para aprobar su reforma, pero debería mantener el diálogo con todos los sectores políticos y sociales y (de este modo) resguardar la gobernabilidad. El ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, ha señalado que el Ejecutivo tendrá una actitud “flexible” para enfrentar el debate legislativo.
A pesar de la aparente buena voluntad del Gobierno, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Melissa Sepúlveda, ha señalado que se trata de una reforma “sin contenido”, según publica el periódico La Tercera. Los jóvenes acusan al Gobierno de no haber dialogado y de haber fabricado su propuesta “entre cuatro paredes”.