Ariadna Castellanos

Con el permiso de los maestros Chano Domínguez, Pedro Iturralde y Jorge Pardo y, como no, bajo la sombra protectora del añorado Paco de Lucía, la música de la joven pianista Ariadna Castellanos es quizá la prueba más fehaciente de que la fusión entre jazz y flamenco tiene futuro. Con el permiso de los maestros Chano Domínguez, Pedro Iturralde y Jorge Pardo y, como no, bajo la sombra protectora del añorado Paco de Lucía, la música de la joven pianista Ariadna Castellanos es quizá la prueba más fehaciente de que la fusión entre jazz y flamenco tiene futuro.

Esta pianista madrileña, cosecha de 1983, despuntó muy pronto e iba para luminaria de la música clásica, pero el flamenco, el jazz se cruzaron en su camino y seducida a partes iguales por el duende y la libertad formal, decidió tomar otro camino. Un sendero complicado y en el que no abundan los mapas.

Pero, a veces, la fortuna sonríe a aquellos que corren riesgos y ella obtuvo un par de premios gordos. Becas para estudiar en la Guildhall School of Music and Drama de Londres y en el Berklee College of Music de Boston, donde llegó a compartir escenario con el mismísimo genio de Algeciras.

Desde entonces, fiel a las enseñanzas de sus maestros, Ariadna no elude meterse en ningún charco, si cree que puede aprender algo por el camino. Por eso ha colaborado con músicos flamencos como Agustín Carbonell «El Bola» o Niño Josele, figuras del jazz como Herbie Hancock o Richard Bona y hasta ‘raperos’ como Nach.

Castellanos grabó su primer disco, ’Flamenco en Black & White’ en 2012, con la producción de Javier Limón, y, estos días, se publicará ‘MJU:ZIK’, su segundo trabajo que ha realizado a dúo con el productor y dj Ed is Dead, uno de los artistas más innovadores de la escena de la música electrónica hispana.

Sí aún no han tenido el placer de oír a esta singular instrumentista, quizá les venga bien acercarse por la Sala Berlanga de Madrid, donde Ariadna participará en una nueva edición del Festival Flamencos y Mestizos, que organiza Paco Ortega con el apoyo de la SGAE. Les compensará el paseo.

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