Aunque el edificio más alto de América Latina, una moderna torre de oficinas de 64 pisos que se eleva sobre la capital chilena entre dos de sus zonas más pudientes como son el santiaguino barrio de Providencia y Las Condes, se inauguró en agosto del año pasado, después de casi una década de construcción, sigue prácticamente en desuso.
Según informa el diario argentino, quizá por aquello de la rivalidad regional, metiéndole el dedo en el ojo a su país vecino la torre es parte de Costanera Center, un complejo de uso mixto cuyo costo original estaba previsto en 400 millones de dólares, pero que se fue hasta cerca de los 1.000 millones de dólares. Pero esto no es lo peor, sino que aunque la parte comercial del complejo ha estado abierta desde hace tres años; la torre de oficinas permanece vacía, ya un año después de su finalización.
Así, como señala el diario argentino, en lugar de convertirse en un símbolo de la consagración de Santiago de Chile como una de las principales ciudades del subcontinente para los negocios internacionales, la torre se ha convertido en un símbolo de lo contrario: una muestra de cómo desarrollos inmobiliarios ambiciosos en los mercados emergentes pueden verse afectados debido a la mala planificación.
La principal razón por la que Cencosud, la empresa responsable del proyecto y propiedad del multimillonario chileno Horst Paulmann, no ha podido empezar a firmar alquileres de oficinas es que aún no ha conseguido los permisos de ocupación del gobierno y es que, según éste, no ha hecho las mejoras necesarias a las calles de la zona para mitigar el impacto de los miles de trabajadores que se espera lleguen a trabajar en la torre.
Así, en el mejor de los casos, el proyecto se alejará aún más del coste inicialmente previsto ya que, si bien Cencosud espera obtener en unos días luz verde para ocupar los primeros 15.000 metros cuadrados de la torre, necesitará al menos otro año y 60 millones de dólares adicionales para completar las reformas exigidas y que le permitirían dar uso al total de 70.000 metros cuadrados construídos.