Las últimas restricciones anunciadas por el Gobierno de Donald Trump a la venta de chips y software a Huawei han despertado duras críticas dentro del sector estadounidense de semiconductores. Dos importantes grupos comerciales que representan a miles de empresas han avisado de que el veto socavará la confianza en las compañías estadounidenses y acabará afectando a la seguridad nacional.
EEUU se ha embarcado en una cruzada para sacar a Huawei del terreno de juego en EEUU, acusando a la compañía de suponer un peligro para la seguridad nacional debido a supuesta capacidad para monitorear redes y datos, especialmente con el desarrollo del 5G.
Los dos grupos comerciales creen, sin embargo, que las últimas restricciones anunciadas por el Departamento de Comercio el 17 de agosto serán contraproducentes y acabarán socavando a la industria de semiconductores al crear la percepción de que la tecnología estadounidense no es confiable.
“Estas nuevas restricciones (…) alimentarán la percepción de que el suministro de tecnología de EEUU no es confiable y llevarán a los clientes de fuera de EEUU a solicitar tecnología diseñada fuera de EEUU”, señala SEMI, una asociación industrial para la cadena de suministro de fabricación y diseño de electrónica global. SEMI cuenta con 2.400 empresas asociadas y 1,3 millones de profesionales.
La semana pasada, otro grupo comercial importante, la Asociación de la Industria de Semiconductores (SIA por sus siglas en inglés), criticó los anuncios del gobierno y predijo una “interrupción significativa en la industria de semiconductores de EEUU”. Su ceo, John Neuffer, dijo estar sorprendido y preocupado por el cambio de enfoque de la administración Trump.
“Reiteramos nuestra opinión de que las ventas de productos comerciales no sensibles a China impulsan la investigación y la innovación de semiconductores aquí en EEUU, lo que es fundamental para la fortaleza económica y la seguridad nacional de EEUU”, destacó Neuffer. SIA representa el 95% de las empresas de semiconductores de EEUU por ingresos.
En julio, SEMI ya había avisado de que un conjunto de regulaciones comerciales sobre Huawei en mayo “crearon desincentivos únicos para comprar equipos de semiconductores y software de diseño de origen estadounidense, dando lugar a una pérdida de 17 millones de dólares en ventas de artículos de origen estadounidense a empresas no relacionadas con Huawei ”. Ahora, cree que “la decisión de Comercio de expandir significativamente estas restricciones unilaterales probablemente conducirá a más ventas perdidas, erosionando la base de clientes de los artículos de origen estadounidense”.
La administración Trump debería “perseguir políticas con pocas consecuencias no deseadas y daños al liderazgo tecnológico de EEUU”, ha agregado en un comunicado. “Los ingresos de las ventas globales son una fuente importante de financiación para la investigación y el desarrollo de Estados Unidos en estas tecnologías; la pérdida de ingresos globales dará lugar a una disminución de la I + D, lo que socavará la innovación de semiconductores y, por lo tanto, dañará la seguridad nacional”.