«Estoy segura de que en Chile se va a cambiar la Constitución y vendrá un futuro prometedor», confía la compositora, cantante y artista visual en una entrevista concedida a Europa Press en Madrid, donde se encuentra con motivo de su gira por España.
Mientras las encuestas en el país sudamericano muestran un rechazo mayoritario al borrador de la Carta Magna, Laferte, que se ha leído ya parte del documento, aunque no entero, según precisa, considera que el cambio es necesario. «Siento que con la nueva Constitución viene un tiempo mejor para Chile y para toda la región. Tengo mucha fe en Gabriel Boric, estoy muy positiva», apostilla contundente la artista, que radica en México desde hace años.
Laferte se muestra abierta en sus opiniones y denuncias políticas y sociales, pero puntualiza que solo le gusta hacerlo cuando tiene el sentimiento real o el impulso, como cuando protestó en los Grammy Latinos por la violencia en Chile mostrando el mensaje ‘En Chile torturan, violan y matan’ escrito en su pecho.
«Desde esa performance se piensa que todo lo que hago tiene que ser una declaración política y no quiero que sea así. A veces solo quiero bailar reggaeton», asevera al respecto, para contar que desde aquella vez también recibe «muchas peticiones para alzar la voz por los demás».
En este sentido, subraya que no le gusta cuando a un artista lo presionan por redes sociales para que tenga una postura política de algo porque, a su juicio, «ahí se acaba la libertad».
En aquella alfombra, la chilena también llevó atado al cuello un pañuelo verde, un símbolo a favor de la legalización del aborto. Se ha declarado feminista pese a que, dice, el serlo «todavía genera rechazo porque no hay información suficiente».
«Todavía hay mucha gente que piensa que el feminismo es como el machismo, por eso causa rechazo y se inventan títulos como feminazi, que es algo extremo», lamenta, para explicar que ha sentido que «la gente se asusta». Sin embargo, celebra que la sociedad «está empezando a aprender y es cada vez más consciente»: «Se habla sobre feminismo y eso me da gusto».
En esta línea, Laferte defiende también la libertad de las mujeres sobre la maternidad, una experiencia que ella ha empezado a vivir con el nacimiento de su primer hijo tras un tratamiento hormonal. «Quería experimentar la maternidad y físicamente el embarazo», destaca al respecto.
TRABAJA EN UN NUEVO PROYECTO
Su hijo es ahora una continúa «inspiración», resalta feliz, pese a que admite que está «todo el día haciendo malabares» para conciliar su faceta artística con la maternidad. No obstante, continúa trabajando y prepara ahora su próximo proyecto.
Y es que tras ‘1940 Carmen’, que publicó a finales de 2021 y le sirvió para «canalizar toda la locura y energía de las hormonas durante su embarazo», se encuentra ahora en una continúa búsqueda y creación de su próximo trabajo, si bien es aún «un proyecto muy bebé».
«Estoy planeando el próximo álbum aunque aún no he entrado en el estudio. Va a ser bien distinto en general. Tengo ganas de hacer algo diferente. A pesar de que mi música suena a música viejita yo intento siempre adelantarme. Va a ser más conceptual, solo puedo decir eso», adelanta.
No descarta así probar nuevos sonidos y recursos, siempre en fusión con la música tradicional latinoamericana, siguiendo así algo en lo que ve una «tendencia», «la vuelta de lo viejito». «Lo viejito siempre regresa, solo que hay fusión. Por ejemplo me gusta mucho C. Tangana y siento que su música es muy de vieja escuela, pero tiene la fusión», detalla.
«LA MÚSICA DE ANTAÑO NUNCA VA A DESAPARECER»
«Siento que en general la música de antaño nunca va a desaparecer, solo va mutando y adaptándose a los nuevos tiempos y tendencias», aplaude también en este sentido.
Entre esas tendencias, apoya el uso del autotune como recurso estético y critica su rechazo. «Me encanta el autotune. Creo que aquello de que se usa porque el artista no sabe cantar es de una mirada muy antigua y de ganas de enfrentar y polarizar», declara, para defender el talento de artistas como el puertorriqueño Bad Bunny: «Solo el puede crear el sonido que tiene, con parte de su estética en el uso del autotune. Y es increíble».
De este modo, aboga por dejar de exigir tanto a la música, también en las letras. «A la música no hay que pedirle tanto», clama, al tiempo que hace hincapié en valorar lo que hace sentir. Por ejemplo, apela, a no reclamar a géneros como el reggaeton que «eduquen» o «sean correctos». Eso, en su opinión, «está fuera de lugar».
Con las cosas claras, la artista empieza este 25 de agosto en Alicante su gira por España, que la llevará también a Tenerife, Zaragoza, Valencia, Madrid, Barcelona, Granada y Murcia. Asegura estar «muy contenta» de actuar en el país, con el que siento que «tiene una deuda»: «Quisiera venir más».