Su nombramiento es, según ha informado el diario ‘O Globo’, controvertido debido a la Ley de Propiedad del Estado, que prohíbe que una persona que haya actuado en los últimos 36 meses en la toma de decisiones de un partido político sea elegida.
La polémica designación, esperada, por otra parte, ha sido anunciada por el propio Lula en su perfil oficial de Twitter, y se ha hecho pública tras una reunión entre el presidente electo y Prates, quien fue su principal interlocutor para el sector energético durante su campaña electoral.
El senador, abogado y economista, de 54 años, fue miembro de asesoría jurídica en Braspetro, la subsidiaria de Petrobras, y también secretario de Estado de Energía en el estado brasileño de Río Grande del Norte.
Prates, que incluso llegó a ser nominado por Lula para ocupar la cartera del Ministerio de Minas y Energía, asumió su cargo de senador en 2019 en sustitución de Fátima Bezerra, quien fue electa gobernadora de Rio Grande do Norte, según ha informado el diario ‘Folha de S. Paolo’.