Esta cosecha récord supondrá lograr una producción mayor en 45,7 millones de toneladas, destacando el aumento de algunos productos como el arroz, el maíz o la soja que, precisamente, representan el 92% del total de la producción agrícola.
En comparación con la anterior Encuesta Sistemática de la Producción Agropecuaria (LSPA), publicada en el mes de junio y que ya preveía cifras récord, la producción agrícola estimada es superior en 0,5 puntos porcentuales y en 3,5 millones de toneladas. Se trata de un incremento más moderado en comparación con la anterior revisión.
El buen desempeño de la cosecha se debe al aumento de las áreas de siembra, así como a los pocos contratiempos climáticos que se están dando en este año. En 2022, los altos precios de los bienes hicieron que los productores aumentaran el área de cultivo de estos productos.
Además, los buenos precios, junto a un clima muy beneficioso en 2023 en comparación con 2022, llevarán a un incremento significativo en el segundo semestre. Este incremento permitirá una reducción de costes en la alimentación de los animales, lo que afectará también positivamente a la ganadería.