El norte de Ecuador enfrenta una crisis ambiental y humanitaria tras el derrame masivo de petróleo registrado en marzo. La situación, que afecta especialmente a comunidades dependientes de la pesca y la agricultura, ha disparado las alertas en organismos internacionales. Naciones Unidas ya coordina con el Gobierno ecuatoriano medidas de asistencia urgente, en un contexto donde la falta de agua potable y la contaminación representan riesgos críticos para la población.
Contaminación y aumento de enfermedades
El portavoz de la Secretaría General de la ONU, Stéphane Dujarric, informó que el personal de la organización está midiendo la contaminación de hidrocarburos y metales pesados en diferentes ecosistemas de la provincia de Esmeraldas. Según datos de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), al menos 150.000 personas requieren ayuda humanitaria inmediata.
El derrame ha provocado un aumento alarmante de enfermedades respiratorias y gastrointestinales, agravando las condiciones de salud en la región
Los sectores más afectados son la pesca, la agricultura y la marisquería, fuentes esenciales de empleo y alimentación para la población local.
Impacto en mujeres y sectores productivos
Más de 37.000 mujeres, principalmente mariscadoras, han perdido su principal medio de vida. Esta pérdida económica no solo incrementa la vulnerabilidad sanitaria, sino también los riesgos de violencia de género, alertó Dujarric.
La crisis impacta de manera desproporcionada a las mujeres, quienes ahora enfrentan mayores riesgos de violencia y exclusión social
El origen del desastre: ruptura de oleoducto
El pasado 13 de marzo, se rompió la tubería principal del Sistema de Oleoductos Transecuatoriano (SOTE) en la provincia de Esmeraldas, derramando aproximadamente 25.000 barriles de crudo, según Petroecuador. Posteriormente, el 25 de marzo, uno de los diques que contenían el vertido también colapsó, agravando la situación.
El derrame, causado aparentemente por un deslizamiento de tierra en el municipio de Quinindé, afectó los principales ríos de la provincia, dejando temporalmente sin suministro de agua potable a varias ciudades, incluida la capital provincial, Esmeraldas.
Coordinación de la ONU con el Gobierno de Ecuador
La coordinadora residente de la ONU en Ecuador, Lena Savelli, mantiene contacto permanente con el Gobierno ecuatoriano para compartir datos y recomendaciones que permitan optimizar la respuesta humanitaria.