Chaves, que tomará posesión como jefe de Estado de Costa Rica el 8 de mayo, había sido condenado por el Tribunal Administrativo del Banco Mundial, que consideró probadas situaciones de acoso sobre dos trabajadoras que tenían 22 y 24 años cuando ocurrieron los hechos.
La institución constató «insinuaciones sexuales» y un «patrón de conductas inadecuadas de naturaleza sexual» por parte de Chaves, a quien incluso se le vetaron los ascensos y la subidas de sueldo como represalia por sus conductas, que incluyen comentarios de índole sexual, acercamientos no deseados o invitaciones a vacaciones, entre otras.
Estos hechos enturbiaron la campaña de Chaves, que llegó a negar el acoso y habló de «diferencias culturales» entre él y sus víctimas. Sin embargo, finalmente ha terminado por disculparse en un vídeo difundido entre sus seguidores y en el que promete tolerancia cero con el acoso durante su futuro Gobierno, según el diario ‘La Nación’.
«Lamento profundamente las acciones que ocurrieron hace más de 15 años y que afectaron a excolegas mías en el Banco Mundial», afirma el mandatario electo, que se limita a decir que estas mujeres «sintieron la necesidad de presentar una queja de acoso».
«Ofrezco una vez más mis más sinceras disculpas a esas colegas, sin reserva alguna. He reflexionado profundamente, aprendí mucho y entendí mejor lo que me permite hoy actuar con decisión como presidente», añade.
Chaves se compromete a saldar la «deuda histórica» con las mujeres en distintos ámbitos, para lo cual propone la creación de una comisión que deberá definir las políticas públicas de la administración y que tendrá al frente a la vicepresidenta, Mary Munive.
Con este compromiso, «inicia la ruta de mi Gobierno y cierra un capítulo doloroso en la vida de mis antiguas colegas, mi esposa, mis hijas, mis hermanas y la mía propia», ha explicado.