La Policía del condado de Los Ángeles ha detenido este domingo a una reportera de una radio local mientras cubría las protestas que se estaban produciendo a las puertas de un hospital en el que varios agentes estaban siendo tratados de las heridas que recibieron durante un tiroteo el sábado por la noche.
La periodista, Josie Huang, que trabaja para la emisora KPCC y el portal de noticias ‘LAist’, ha sido detenida frente al Centro Médico St. Francis en Lynwood, una ciudad en el sur del condado de Los Ángeles, y liberada horas después, con una acusación de obstrucción a la justicia.
La cadena de televisión ABC7 ha emitido un vídeo en el que se ve a varios agentes inmovilizando a Huang en el suelo, mientras es esposada. El mismo medio ha asegurado que la reportera fue detenida «repentinamente» cuando se acercó a la línea que los agentes habían marcado para contener las protestas.
Un grupo de personas se había congregado a las puertas del hospital, en el que se estaban recuperando de sus heridas dos policías que habían sido disparados dentro de su coche patrulla en la noche del sábado en Compton, en el sur del condado de Los Ángeles.
La situación entre las autoridades y la comunidad afroamericana se ha tensado en las últimas semanas a raíz de las manifestaciones contra el abuso policial que han tenido lugar en varios puntos del país y que en Los Ángeles ha contado con sus propios episodios de violencia racial, como el asesinato reciente de Dijon Kizzee en Westmont, que desató varios días de protestas.
La semana pasada, los agentes del Departamento del Sheriff de Los Ángeles abatieron a un hombre que, según dijeron, abrió fuego contra ellos mientras cumplían una orden de registro en Compton, tal y como ha recordado el periódico ‘Los Angeles Times’.
Según las autoridades, Huang se interpuso y dificultó la detención de un manifestante que se negó a cumplir las órdenes de los agentes, pese a las «repetidas» indicaciones que le hicieron a la reportera para que se mantuviera al margen.
La Policía ha comunicado que Huang no se identificó como periodista y que carecía de las credenciales «adecuadas», aunque algunos testigos y compañeros de la prensa han desmentido estas afirmaciones.
Huang, liberada el domingo por la mañana, ha escrito en sus redes sociales una serie de mensajes, compartiendo vídeos e imágenes de lo sucedido y ha explicado que en todo momento sus credenciales como miembro de la prensa estuvieron a la vista de todos.