A partir de este viernes vuelven a subir los precios de los combustibles en Argentina, en este caso el avance será del 1,5% de media para todo el país. A partir de esta cifra, las empresas pueden ajustar por debajo o por encima siempre que se mantenga la variación convenida. A partir de este viernes vuelven a subir los precios de los combustibles en Argentina, en este caso el avance será del 1,5% de media para todo el país. A partir de esta cifra, las empresas pueden ajustar por debajo o por encima siempre que se mantenga la variación convenida.
Con este incremento, los valores de los combustibles de venta al público estará levemente por encima de la criara vigente a 31 de diciembre de 2014. En esa fecha, la rebaja que se aplicó fue de un 5% de media.
Desde el pasado mes de febrero y todos los meses en adelante, se han ido produciendo subidas en los precios que finalmente acabaron por dejar en nada la rebaja del año pasado.
El principal motivo que esgrimen en los medios latinoamericanos para esta subida es que el precio a que las productoras venden el petróleo a las refinadoras es independiente del precio que tiene en el mercado internacional.
A finales de 2014, el precio tuvo una rebaja de siete dólares para posibilitar la disminución en los surtidores, puesto que el combustible pasó de 84 dólares a 77 en el caso del crudo ligero. Después de ello, el Gobierno dio un subsidio a las petroleras de tres dólares por barril para seguir con la actividad en las provincias productoras.
El diario argentino Junio ha recordado que como las facturas a la refinadoras se facturan en dólares, aunque se cobran en pesos usando el tipo de cambio oficial, el público siente el impacto de la devaluación.
Así, si se toma el período entre el 8 de mayo y ayer, el peso se devaluó un 1,17%, mientras que el aumento que se aplica a los combustibles es del 1,5%.
Sin embargo, tanto en mayo como en junio, el alza media de los combustibles es levemente superior a la depreciación del peso y así, si se toman como referencia el 8 de mayo y ayer, el peso se ha devaluado un 1,17% mientras que el avance de los combustibles es del 1,5%.
