Brasil ha contado en el mes de julio con 11.796 nuevos empleos formales, lo que viene a ser la caída más pronunciada en este mes durante los últimos 15 años. Así al menos lo ha señalado el Ministerio de Trabajo. Brasil ha contado en el mes de julio con 11.796 nuevos empleos formales, lo que viene a ser la caída más pronunciada en este mes durante los últimos 15 años. Así al menos lo ha señalado el Ministerio de Trabajo.
La cartera laboral ha anunciado que el mes pasado los nuevos puestos de trabajo cayeron un 71,5% en relación a los creados en el mismo mes del año precedente, cuando se contabilizaron 41.463 empleos formales.
La cifra no había sido tan baja desde 1999 cuando firmaron 8.057 contratos. De hecho, en julio de este año, las empresas brasileñas contrataron en julio a 1,746 millones de trabajadores con todas las garantías laborales y despidieron en el mismo período a 1,735 millones, según los datos divulgados por el Ministerio.
Según este balance, en los primeros siete meses del año, en Brasil se crearon 632.224 nuevos puestos de trabajo, lo que viene a ser una caída del 30,3% frente al mismo período del año pasado (cuando se generaron 907.214 empleos).
Por su parte, los sectores de servicios, agricultura y construcción civil generaron en julio 24.860 nuevos puestos de trabajo, el número de despidos superó al de nuevos contratos en 15.392 en el sector industrial.
De acuerdo con diferentes indicadores divulgados por el Gobierno, Brasil sufrirá este año una desaceleración económica presionada principalmente por el mal desempeño de la industria, cuya producción sufrirá una significativa reducción.
Sobre todo esto, el ministro de Trabajo, Manoel Dias, ha reconocido que el Mundial de Fútbol ha perjudicado la creación de empleo debido a los días festivos a los que se encontraron las empresas.
“En la medida en que se reduce el número de días trabajados, se reduce el número de personas contratadas”, ha asegurado.
