El presidente peruano Ollanta Humala, se enfrenta en el Foro Económico Mundial, que se celebra en Davos (Suiza) a su primer gran examen sobre su nueva imagen moderada ante el poder económico internacional. Los financieros mundiales deberán refrendar el cambio centrista que ha experimentado el mand El presidente peruano Ollanta Humala, se enfrenta en el Foro Económico Mundial, que se celebra en Davos (Suiza) a su primer gran examen sobre su nueva imagen moderada ante el poder económico internacional. Los financieros mundiales deberán refrendar el cambio centrista que ha experimentado el mandatario andino, al acercarse a las grandes empresas. Pues hace sólo un año, la imagen el mundo tenía de Humala era la de un hombre de profundas convicciones de izquierdas.
Ollanta Humala era un militar de izquierdas que había realizado varios intentos de golpes de estado contra Fujimori, en los que no consiguió alzarse con el poder. Tras perder las elecciones de su país en 2006, Humala se transformó. Desde entonces su estrategia ha sido alejarse paulatinamente del polo de izquierdas del venezolano Chávez, para tomar una posición más centrada, con buenas relaciones con los poderes económicos.
Como antes hemos mencionado, Humala se presenta en la cumbre de Davos, con su nueva imagen para el mundo, una especie de “Lula” a la peruana. El presidente de Perú ha cambiado su semblante de peligroso ex militar de izquierdas, por la de un hombre moderado y amigo de los poderes económicos.
Para preparar ese desembarco en la agenda de los grandes poderes económicos, el presidente peruano ha tendido una estrategia de comunicación, junto al diario español El País, para enseñar al “nuevo” Humala al público europeo y mundial. La campaña de imagen ha contado unos amplios reportajes sobre Perú, una destacada conferencia con líderes políticos y empresariales y una entrevista que realizó el consejero delegado de Prisa, Juan Luis Cebrián, un histórico director del diario que ascendió para dirigir todo el grupo empresarial.
Verle rodeado de poderosos empresarios españoles con grandes inversiones en Latinoamérica habría sido raro hace unos años cuando era un adalid del izquierdismo. Pero ahora no. Humala ha podido sentarse en la misma mesa que César Alierta, presidente de Telefónica, Francisco González, presidente del banco BBVA, Antonio Brufau, presidente de Repsol YPF, así como con el ex presidente español Felipe González o el ya mencionado Juan Luis Cebrián.
El foro de Davos es un escaparate para vender a Perú como un lugar atractivo para los inversores internacionales. Ollanta Humala desea mostrar al mundo que su país es un mercado estable, con seguridad jurídica y con unas grandes posibilidades, en el que los financieros de todo el globo pueden destinar con total tranquilidad sus fondos.
Humala quiere que los empresarios analicen las posibilidades de inversión en sectores como la energía y la industria petroquímica. Además les ha instado a que apuesten por los proyectos de inversión en infraestructura, debido al déficit que tiene Perú en materia de comunicaciones y transporte.
