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La alerta se extiende desde México hasta el sur

El tsunami amenaza a América Latina

El tsunami de escala 8,9 en la escala de Ritcher que ha sacudido la costa japonesa amenaza todo el Pacífico. Ante la alerta, Latinoamérica ha empezado a movilizarse. Los Gobiernos de Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala, El Salvador, Panamá y Costa Rica han comenzado a tomar medidas ante el peligro de que la catástrofe llegue a la zona costera. El desastre ha provocado, no sólo que tiemble literalmente la superficie del país nipón, sino también que lo hagan sus finanzas. De la misma manera, la economía de los países del subcontinente podría verse perjudicada. El tsunami de escala 8,9 en la escala de Ritcher que ha sacudido la costa japonesa amenaza todo el Pacífico. Ante la alerta, Latinoamérica ha empezado a movilizarse. Los Gobiernos de Chile, Colombia, Ecuador, Guatemala, El Salvador, Panamá y Costa Rica han comenzado a tomar medidas ante el peligro de que la catástrofe llegue a la zona costera. El desastre ha provocado, no sólo que tiemble literalmente la superficie del país nipón, sino también que lo hagan sus finanzas. De la misma manera, la economía de los países del subcontinente podría verse perjudicada.

La alerta de tsunami se ha extendido a toda la cuenca del Pacífico, excepto el territorio continental de EEUU y Canadá, después de que un fuerte terremoto sacudiera Japón. Los avisos se extienden desde México hasta el sur del continente. Incluyen a Chile, Ecuador, Colombia, Perú, Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Honduras, Nicaragua y Panamá.

El terremoto en la costa nororiental de Japón ha sido el más intenso en 140 años y provocó un tsunami con olas de hasta 10 metros que arrasaron tierras agrícolas, casas, cultivos, vehículos y provocaron incendios.

El desastre natural ya ha desembocado en graves consecuencias económicas para el país oriental. Lo mismo podría suceder en varios países latinoamericanos en los que ya se ha decretado la alerta.

En cuanto a América Latina, aún es pronto para evaluar posibles consecuencias financieras, ya que el tsunami aún no ha tocado de lleno las costas de estos países.

Por lo pronto, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, decretó el estado de excepción y la evacuación de todas las zonas costeras del país y de las Islas Galápagos. La nación se está preparando para declarar fuerza mayor sobre las exportaciones de petróleo como medida preventiva.

Por su parte el Gobierno de Sebastián Piñera ha anunciado una alerta preventiva en las costas del país ante el temor de la llegada del temido tsunami provocado por el sismo de este viernes en Japón.

También el Gobierno de la presidenta costarricense, Laura Chinchilla, se mantiene en la línea de decretar, por el momento, la alerta preventiva en el país centroamericano. En este sentido, la presidenta de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Vanessa Rosales, explicó que con la alerta se activan los comités locales de emergencias, que serían los encargados de movilizar a la población si es necesario.

Mientras que en Colombia, las autoridades locales emitieron una alerta de tsunami para la costa pacífica aunque también sin orden de evacuación. La directora del Sistema Nacional de Atención y Prevención de Desastres, Luz Amanda Pulido, explicó a emisoras locales que la alerta rige para los cuatro departamentos colombianos que tienen costa sobre el Pacífico: Chocó, Valle del Cauca, Cauca y Nariño.

Colombia cree que las ondas oceánicas generadas por el poderoso terremoto de Japón podría llegar a la costa del Pacífico a principios de la noche del viernes, pero no se espera que las olas sean demasiado grandes.

Poco después de darse a conocer el trágico suceso en Japón, los seguros contra el riesgo de impago de la deuda (CDS, por sus siglas en inglés) nipona se encarecían en los mercados secundarios. En un contexto internacional, las aseguradoras caen en picado.

Estos productos derivados de la deuda soberana de Japón se han situado a 84 puntos básicos a primera hora de la mañana, cinco más de los registrados en el cierre de ayer. La función de los CDS es asegurar que los tenedores de deuda cobrarán aunque esta quiebre.

Un incremento de cinco puntos básicos en su precio supone una subida equivalente a los 1.000 dólares en el coste de protección de 10 millones de dólares de bonos soberanos a cinco años.

Las acciones de las aseguradoras han caído en las principales bolsas del mundo tras conocerse la magnitud del tsunami, ante la certeza de los inversores de que los costes para la reconstrucción de los destrozos serán muy elevadas.

En Francfort las acciones de Munich Re caían un 4,7% en la apertura de la sesión, y Hannover Re registraba pérdidas de 4,2%. En Zurich, Swiss Re, la segunda mayor reaseguradora del globo, descendía un 5% y la francesa Scor hacía lo propio un 4%.

Swiss Re será una de las más afectadas, ya que también tuvo sufrirá las consecuencias del terremoto que asoló Nueva Zelanda hace algunas semanas y las lluvias torrenciales en Australia. Esto se traduce en un gasto aproximado de 1.000 millones de dólares en los dos primeros meses de 2011.

Los expertos opinan que a el tsunami japonés puede superar las pérdidas conjuntas de estos dos desastres. La tragedia nipona pone también en duda los objetivos trazados por Munich Re para este año. La compañía alemana también se ha visto afectada por los sucesos arriba mencionados.

Esta catástrofe natural ha dejado más de 1.500 muertos confirmados y 88.000 desaparecidos. Además, el aeropuerto de Tokio, así como varios medios de transporte internos, han quedado fuera de servicio.

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