La presidenta argentina, Cristina Fernández, informó al secretario general de la CGT (Confederación General del Trabajo), Hugo Moyano, que no asistirá al acto convocado por el día del trabajador, ya que viajará a Río Gallegos para estar con su familia, tras seis meses de la muerte de su esposo, el ex mandatario Néstor Kirchner. El líder sindical pretende hacer una demostración pública de su fuerza de convocatoria, ya que está previsto que alrededor de 500.000 personan acudan a la avenida 9 de Julio para celebrar el acto. La presidenta argentina, Cristina Fernández, informó al secretario general de la CGT (Confederación General del Trabajo), Hugo Moyano, que no asistirá al acto convocado por el día del trabajador, ya que viajará a Río Gallegos para estar con su familia, tras seis meses de la muerte de su esposo, el ex mandatario Néstor Kirchner. El líder sindical pretende hacer una demostración pública de su fuerza de convocatoria, ya que está previsto que alrededor de 500.000 personan acudan a la avenida 9 de Julio para celebrar el acto.
Al parecer, Cristina habría puesto la excusa del viaje personal para no acudir a este acto, ya que un miembro del entorno de la mandataria argentina declaró que, si se presentaba junto al líder de la CGT en el acto por el día del trabajador, Fernández perdía políticamente y no quería que la sociedad interpretara que ella es un seguro de la organización sindical.
La apuesta de Moyano es ambiciosa. El líder de la central obrera pretende concentrar 500.000 personas frente al emblemático edificio que actualmente ocupan los ministerios de Salud y Desarrollo Social. Con este propósito, Moyano trata de hacer una demostración pública de su fuerza de convocatoria.
Pese a que Cristina no dará la cara en este acto, la mandataria trabaja por su cuenta. Fernández ha llamado al diálogo a la Unión Industrial (UIA) y la Confederación General del Trabajo (CGT), por lo que ha previsto que se celebre una reunión la próxima semana. El objetivo del encuentro será generar una política con proyección a futuro para que el país crezca. La cita se daría en medio de la puja salarial por las paritarias y de la lucha con algunas empresas por la designación de directores estatales por parte de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES).
Tanto sindicatos como empresas, especialmente las industrias, se encuentran en estos momentos negociando reajustes salariales. Entre febrero y abril, cinco gremios (camioneros, maestros, encargados, farmacéuticos y petroleros) ya cerraron acuerdos de aumento por un 24%, a pesar de que comenzaron solicitando un 33% de subida. Este año los sindicatos buscan incrementar el mínimo y son reticentes a aceptar cuotas.
El diálogo social entre la UIA y la CGT había quedado suspendido desde el pasado enero, cuando esta primera se expresó en contra de dialogar con los gremios si el gobierno no se sentaba, también, en la mesa de negociaciones.
La CGT de Hugo Moyano recibió muy bien la convocatoria de la presidenta Cristina Kirchner para reflotar el diálogo social y anticipó que llevará a la mesa de negociaciones su proyecto para repartir las ganancias de las empresas con los trabajadores.
Mientras, el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) Juan Carlos Sacco afirmó que espera que el llamado al diálogo de la presidenta sea para armar políticas activas que permitan combatir el flagelo de la inflación.
Por su parte, Cristina Fernández destacó que es necesario seguir apuntalando las políticas productivas y de empleo en Argentina y lo favorable que es que siga creciendo la rentabilidad de empresarios y trabajadores. Por ello, tanto el gobierno como los sindicatos deben comprometerse con los trabajadores y los empresarios para alcanzar un mayor grado de producción para todos.
