Telefónica elevó un 2,4% su beneficio del ejercicio 2009, hasta alcanzar los 7.776 millones de euros. La operadora cumplió por séptimo año consecutivo todos sus objetivos financieros, lo que el mercado premió con una subida del 2% a sus acciones en la Bolsa. Una evolución propiciada por el resultado operativo antes de amortizaciones (Oibda) que alcanzó los 22.603 millones de euros, un 0,9% más, apoyado fundamentalmente por el negocio en Latinoamérica. Telefónica elevó un 2,4% su beneficio del ejercicio 2009, hasta alcanzar los 7.776 millones de euros. La operadora cumplió por séptimo año consecutivo todos sus objetivos financieros, lo que el mercado premió con una subida del 2% a sus acciones en la Bolsa. Una evolución propiciada por el resultado operativo antes de amortizaciones (Oibda) que alcanzó los 22.603 millones de euros, un 0,9% más, apoyado fundamentalmente por el negocio en Latinoamérica.
Además, la operadora ha ratificado su objetivo de alcanzar un beneficio neto por acción de 2,10 euros para este año, así como dividendos de 1,40 euros por acción en 2010 y un mínimo de 1,75 euros por título en 2012. Telefónica también confía en registrar un crecimiento interanual de los ingresos consolidados de entre el 1% y el 4% e invertirá a lo largo del ejercicio entre 7.450 y 7.650 millones de euros.
A pesar de las dificultades derivadas de un entorno económico adverso, la compañía de telecomunicaciones elevó un 0,2% su facturación en términos orgánicos, hasta los 56.731 millones de euros.
Respecto al cuarto trimestre, el beneficio del grupo se incrementó un 22%, hasta los 2.440 millones de euros, una cifra que supera las previsiones de los analistas, que esperaban una ganancia neta de 2.300 millones. El resultado en los últimos tres meses del año se vio impulsado por una reducción de 591 millones de euros en impuestos sobre beneficios tras la modificación de la UE respecto al fondo de comercio. Además, también se incluyen las ganancias de la venta de su participación de la unidad marroquí Medi Telecom
Los resultados del grupo que preside César Alierta se han visto afectados por la situación económica de Venezuela y la devaluación del bolívar, con un impacto negativo de 548 millones de euros en el resultado neto.
La intensa actividad comercial de la compañía ha permitido incrementar el número de clientes en un 5,1% respecto a 2008, hasta situarse en cerca de 265 millones de accesos, sobre todo por la expansión de los accesos móviles, la banda ancha fija y la televisión de pago. Por áreas geográficas, destacan los crecimientos reportados por Telefónica Europa (6,9% más) y Telefónica Latinoamérica (6,5% más). En el segundo semestre del año, la ganancia neta triplica la obtenida en los seis primeros meses de 2009. Según la operadora, este favorable comportamiento obedece a la “significativa mejora que han presentado la tres regiones de operaciones, cuyas ganancias netas trimestrales han mostrado a lo largo del ejercicio una tendencia ascendente”.
El grupo de telecomunicaciones invirtió 7.257 millones de euros. La mayor parte de las mismas se destinaron a trasformación y crecimiento. Por ejemplo, se incrementó en un 15% la cobertura 3G.
Telefónica Latinoamérica cerró el pasado ejercicio con 168,6 millones de clientes, lo que supone un incremento interanual del 6,5%, “apoyado en el sostenido crecimiento en los negocios de telefonía móvil y banda ancha”. El importe neto de la cifra de negocios se elevó un 5,3% en términos orgánicos, hasta alcanzar 22.983 millones de euros. El resultado operativo antes de amortizaciones (Oibda) en la región fue de 9.143 millones de euros, el 8,3% más. México, Brasil, Venezuela y Argentina fueron los países que más contribuyeron al crecimiento. En una nota de prensa, Telefónica destacó que, en un contexto global de deterioro económico, Latinoamérica tuvo una “destacable estabilidad” en 2009, y presenta perspectivas “de evidente recuperación económica” para 2010, cuyos síntomas ya han empezado a verse en el cuarto trimestre.
Los analistas apuestan por la operadora en medio de la incertidumbre
La incertidumbre que ronda a las economías periféricas de la Unión Europa parece que seguirá marcando el devenir de la Bolsa en una semana en la que se conocerán relevantes datos macroeconómicos, como el paro de España y EEUU y el PIB de la UE. Para evitar sustos indeseados en las próximas sesiones, los analistas consultados creen que Telefónica se ha convertido en un valor imprescindible en las carteras. Diego Jiménez-Albarracín, responsable de Renta Variable del Centro de Inversiones de Deutsche Bank, cree que, a los precios actuales, “Telefónica presenta un potencia de revalorización excepcional”. Desde comienzos de año, la operadora ha tenido un comportamiento “muy pobre” con respecto al Ibex 35 y a sus comparables europeos. “Los últimos castigos han sido en algunas ocasiones injustificados o cuando menos desproporcionados”, añade este experto.
Los datos recientemente presentados por Vodafone en España muestran una clara mejoría en el ingreso medio por cliente y ello, unido a la implementación de políticas de contención de costes, lleva a pensar en una paulatina recuperación del negocio en España.
La operadora española también es uno de los valores preferidos de Jorge Lage de CM Capital Markets Bolsa. Este experto considera que Telefónica será una de las compañías mejor capacitadas para resistir las tormentas que pueda sufrir el mercado. Entre las bondades de la operadora también figura su rentabilidad por dividendo (del 9%), sus saludables ratios de deuda o sus elevados crecimientos de beneficio para este año y el próximo.