Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

El subcontinente cuenta ya con el 20% de las reservas mundiales tras los últimos descubrimientos

América Latina, un actor protagonista en el mercado del petróleo mundial

Petrobras, la petrolera estatal brasileña, se ha convertido, en apenas dos años, en la empresa más grande de América Latina. Su evolución, ligada a grandes descubrimientos de yacimientos de gas y crudo en la zona costera de Brasil, así como una inversión acorde a su crecimiento, reflejan la buena salud del sector en el subcontinente, que cuenta con el 20% de las reservas mundiales. China y la India, que necesitan desesperadamente de energía para su industria, han sabido entender la nueva coyuntura. Petrobras, la petrolera estatal brasileña, se ha convertido, en apenas dos años, en la empresa más grande de América Latina. Su evolución, ligada a grandes descubrimientos de yacimientos de gas y crudo en la zona costera de Brasil, así como una inversión acorde a su crecimiento, reflejan la buena salud del sector en el subcontinente, que cuenta con el 20% de las reservas mundiales. China y la India, que necesitan desesperadamente de energía para su industria, han sabido entender la nueva coyuntura.

En los últimos años se ha producido un salto sin precedentes en cuanto a las reservas mundiales de crudo. El subcontinente americano ha tenido mucho que ver con esta situación ya que, con los últimos descubrimientos, contaría con cerca del 20% de los 1.7 billones de barriles que existen en toda la Tierra. En este contexto, dentro de Latinoamerica, hay escalas, y Venezuela, Brasil y México están en el primer escalón.

Venezuela, en febrero de 2011, se convirtió en el país del mundo con más cantidad de ese combustible en su subsuelo, al certificar 297.000 millones de barriles de reserva gracias el crudo pesado de la Franja del Orinoco. Este dato, con el que supera los 260.000 millones de barriles de Arabia Saudí, hacía del país de Hugo Chávez el abanderado de América Latina, la segunda región del mundo en cantidad de reservas detrás de Oriente Medio con 345.000 millones de barriles de crudo para extraer.

No en vano, mientras que el aumento de los descubrimientos confirmados desde 2009 fue de 20% en el mundo, en América Latina y el Caribe fue del 40%. Venezuela concentra el 85% de las reservas de crudo de la región, según las cifras recopiladas por la Organización Latinoamericana de Energía (Olade).

«No sé si son el 85 por ciento, pero la verdad es que el incremento de reservas probadas implica que nuestro país seguirá siendo uno de los cuatro o cinco primeros jugadores globales en el mundo de los hidrocarburos por muchas décadas más», comentó entusiasmado a IPS Nelson Martínez, director ejecutivo de PDVSA América, división de la estatal Petróleos de Venezuela.

Brasil, por su parte, ha logrado en los últimos años importantes descubrimientos en el subsuelo del océano Atlántico próximo a sus costas, como el campo Tupi en 2007, con 33.000 millones de barriles posibles, el campo Júpiter en 2008, con 12.000 millones de barriles, y el de Cuenca de Santos en 2010, con cerca de 15.000 millones de barriles. Esto ha elevado al país de Petrobras a contar con algo más del 5% de las reservas latinoamericanas. Lo que no ha impedido que la petrolera brasileña se convierta en la mayor empresa por beneficios del subcontinente.

El tercero en cantidad es México, que, aunque vio declinar sus reservas probadas en los últimos 15 años, cuenta con el 4% de las reservas de la región, gracias a que en 2009 cuantificó más de 137.000 millones de barriles en el subsuelo de la región del Paleocanal de Chicontepec. Le sigue Ecuador, con el 3% de las reservas probadas de crudo después de que en 2008 certificara las existencias de su yacimiento de Yasuni ITT.

El petróleo pesado de este conjunto de campos en la zona que ocupa el parque nacional amazónico de Yasuni (Ecuador) parece cada vez más cerca de empezar a extraerse. La iniciativa, que ha partido del gobierno de Rafael Correa, de mantener dicho petróleo bajo tierra a cambio de que la comunidad internacional haga aportaciones dinerarias que cubran los beneficios del país, no está teniendo el éxito esperado.

El resto de los países de la región tiene, por ahora, el restante tres por ciento de reservas, pero no descansan en la búsqueda de nuevas fuentes. Argentina, por ejemplo, tradicionalmente una potencia en energía, inició el Programa de Desarrollo Exploratorio y Productivo 2010-2014, a cargo de la empresa hispano-argentina Repsol YPF y orientado a conocer el potencial de reservas en todo el subsuelo del país.

Según datos de la Olade, ese país tenía en 2009 reservas petroleras que consumiría, si no logra sustituirlos como es su intención, apenas 11 años. Brasil contaría con petróleo para 18 años, mientras que Colombia tendría para ocho, Ecuador para 34, México para 11 y Venezuela para 201 años. También Uruguay tiene por primera vez en prospección varias zonas en tierra y en su zona soberana del océano Atlántico, con informes primarios auspiciosos.

México comprometió una inversión de más de 27.000 millones de dólares hasta 2019 para desarrollar su potencial en aguas profundas y en tierra. Esto exige renovar sus equipos de perforación, pues el 80% de sus 126 taladros tienen entre 37 y 52 años, según reconoció Gustavo Hernández García, subdirector de planeamiento y evaluación de la firma estatal mexicana Pemex. Por su parte, la empresa Petrobras planea realizar inversiones del orden de 73.000 millones de dólares hasta 2015, conjuntamente con sus socios, en la plataforma marina de la Bahía de Todos los Santos. La inversión es, por tanto, el único modo de mantener el ritmo productivo.

Datos tomados del articulo de Gonzalo Ortiz para IPS.

Más información

Scroll al inicio