El Gobierno de Nicaragua ha rechazado este martes el informe presentado por la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, justificando que está «politizado» y ha sido elaborado «a partir de fuentes exclusivamente opositoras al Gobierno».
En el informe, Bachelet denuncia que en Nicaragua no hay progreso en materia de Derechos Humanos y que la Ley de Amnistía «ha favorecido la impunidad» de los responsables de «graves violaciones de los Derechos Humanos», entre otras cuestiones.
Nicaragua ha considerado que el trabajo no se ajusta a la realidad y ha criticado que también cuente con información «proveniente de ONGs y medios de comunicación abiertamente vinculados al intento fallido de golpe de Estado de 2018», según ha informado la emisora La Primerísima, que cita a una miembro de la misión diplomática de Nicaragua ante la ONU.
Así, Nicaragua ha reclamado que se respete «el principio de independencia y soberanía» del país y ha pedido «el cese de toda política de injerencia».