Hay quien piensa que el éxito internacional que ha obtenido el ‘nuevo pop chileno’, sólo ha servido, en realidad, para reforzar a la industria discográfica tradicional. Y apuesta por alternativas mas guitarreras y potentes como Tenemos Explosivos. Hay quien piensa que el éxito internacional que ha obtenido el ‘nuevo pop chileno’, sólo ha servido, en realidad, para reforzar a la industria discográfica tradicional. Y apuesta por alternativas mas guitarreras y potentes como Tenemos Explosivos.
La banda está formada por Eduardo Pavez en la voz, Matias Acuña en la batería, Alvaro Urrea en el bajo y Juan José Sánchez y Rene Manuel Sanchez en las guitarras y las voces y lleva en activo desde 2009, con éxito creciente.
Se describen como un grupo post-hardcore y usan las guitarras distorsionadas y las atmósferas moderadamente oscuras para crear ambientes melancólicos que evocan el trabajo de algunas bandas siniestras del Madrid de la década de los ochenta como Décima Víctima.
Y también, por supuesto, ellos mismos también reconocen en las entrevistas algunas otras influencias. Algunas de corte ‘clásico’, como los Nirvana de ‘In Utero. Y otras más contemporáneas como los también españoles Standstill.
Sobre todo porque las murallas sonoras no ahogan el interés melódico de unas canciones que respiran, a pesar de estar envueltas en una instrumentación de intenciones agobiantes. Lo mismo que el aliento poético de unas letras que parecen buscar despertar los sentimientos del oyente.
Hace unos meses publicaron La Virgen de los Mataderos, su segundo álbum. Una colección de temas desasosegantes y honestos que les han confirmado como parte fundamental de esa opción distinta al pop más comercial que una parte del público chileno esperaba.
