Los inversores se mantenían hoy cautos con sus apuestas sobre Red Eléctrica de España (REE) con apenas cambios frente al cierre de ayer. El miércoles, la energética llegó a caer más de un 2% después de que Bolivia anunciase la expropiación de una de sus filiales. Ahora, el mercado espera noticias de cuánto pagará el Gobierno de Evo Morales por la compañía. Los inversores se mantenían hoy cautos con sus apuestas sobre Red Eléctrica de España (REE) con apenas cambios frente al cierre de ayer. El miércoles, la energética llegó a caer más de un 2% después de que Bolivia anunciase la expropiación de una de sus filiales. Ahora, el mercado espera noticias de cuánto pagará el Gobierno de Evo Morales por la compañía.
Mientras que el ministro de Energía boliviano, Juan José Sosa, ha anunciado en una televisión local que el precio de indemnización a la española por la nacionalización de su filial Transportadora de Electricidad (TDE) podría rondar los 30 millones de euros, algunos expertos elevan esta cifra al doble.
El punto de partida del mandatario boliviano se sitúa en el precio que hace ahora 15 años Unión Fenosa pagó por su privatización. Sin embargo, los expertos esperan que según avancen las conversaciones entre La Paz y Madrid y se realicen las auditorías externas, la indemnización a percibir por REE, en la que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales mantiene un 20%, se acerque a la inversión realizada por TDE desde 2002: 67 millones de euros.
Por el momento, lo que sí es cierto es que el movimiento del Ejecutivo de Evo Morales tendrá sus cifras definitivas sobre la mesa antes de seis meses, tiempo en el que una compañía independiente elegida por La Paz dictaminará el justiprecio de la expropiación. Todo parece indicar que el proceso se llevará a cabo de manera más amigable que la todavía reciente nacionalización de YPF por parte del Gobierno argentino de Cristina Fernández, si bien es cierto que los analistas políticos encuentran similitudes populistas entre las decisiones de ambos gobernantes latinoamericanos.
Mientras las cifras se van perfilando y llegan nuevas noticias desde el otro lado del Atlántico, los gestores que más apostaban hoy por órdenes en el lado de las compras eran los de Credit Suisse y los barceloneses y madrileños de Capital at Work. Al otro lado de la ventanilla, los saldos netos negativos más abultados correspondían a las mesas de Deutsche Bank, Inversis Banco e Ibersecurities, el bróker de Banco Sabadell.
