Petrobras aspira a encontrar fuera de Brasil nuevas fuentes de ingresos, y Angola podría convertirse en la base de este crecimiento. La compañía presidida por José Sergio Gabrielli ha anunciado el hallazgo de un yacimiento de petróleo en aguas profundas frente a las costas del país africano, en el que opera desde 1979. Petrobras aspira a encontrar fuera de Brasil nuevas fuentes de ingresos, y Angola podría convertirse en la base de este crecimiento. La compañía presidida por José Sergio Gabrielli ha anunciado el hallazgo de un yacimiento de petróleo en aguas profundas frente a las costas del país africano, en el que opera desde 1979.
Sin embargo, esto sólo podrá cumplirse si los precios del petróleo permiten hacer rentables estos proyectos, además de contar con la tecnología necesaria. Según los analistas de Deutsche Bank, la inversión en el sector energético brasileño registrará un crecimiento del 19% hasta 2011, y la compañía parece preparada para explorar un territorio muy similar al de la costa carioca.
Según ha asegurado durante un acto celebrado en Madrid Florian Tanzer, analista para Latinoamérica de DWS Investmens, en 2020 Brasil podría pasar a ocupar el segundo lugar en el ranking de productores mundiales, sólo por detrás de Irán. Pero para lograrlo el país deberá realizar un gran esfuerzo inversor. Para el experto, el sector petrolero alcanzará en 2011 los 269.700 millones de reales en inversión.
Pero la compañía se ha consolidado en los últimos años como una de las que más crece en el mundo con una producción diaria que supera los 2,5 millones de barriles. La firma actúa, además de en Brasil y en Angola, en Argentina, Bolivia, Nigeria, Colombia, Perú, Venezuela, EEUU y Ecuador. Además cuenta con la tecnología más avanzada en el mundo en la exploración y explotación de hidrocarburos en aguas profundas.
Pero la inversión se torna ahora fundamental, mucho más tras la caída de los precios del crudo que casi impiden la rentabilidad de los megayacimientos brasileños. La compañía ya anunció el pasado año que su plan de inversiones superaría los 20.000 millones de euros para comprar plataformas y buques de exploración sumergibles para explorar las aguas profundas hasta tres kilómetros.
Para obtener la financiación que permita a la paraestatal comprar la maquinaria necesaria, la compañía ha cuadruplicado la venta de deuda corporativa en el último año, aprovechando el apetito de los inversores por los activos cariocas.
De acuerdo con la petrolera brasileña, el nuevo yacimiento fue descubierto tras una perforación de 2.830 metros, y en las primeras pruebas el pozo alcanzó una producción superior a los 6.500 barriles de petróleo por día.
Esta es la segunda reserva descubierta en el llamado Bloque 15/06, un área del océano Atlántico cuya exploración fue concedida al consorcio Sonangol E.P., que es operado por Eni Angola (35%) y en el que la brasileña tiene una participación del 5%. Los otros socios son SSI Fifteen Limited (20%), Sonangol P&P (15%), Total (15%), Falcon Oil Holding Angola (5%) y Statoil Angola (5%).