La Bolsa de Sao Paulo, Bovespa, cayó el pasado viernes un 3% en cuanto se supo que sería Nelson Barbosa quien sustituiría a Joaquim Levy al frente de la cartera económica del Gobierno de Dilma Rousseff. Este lunes, el parqué brasileño operaba prácticamente plano. La Bolsa de Sao Paulo, Bovespa, cayó el pasado viernes un 3% en cuanto se supo que sería Nelson Barbosa quien sustituiría a Joaquim Levy al frente de la cartera económica del Gobierno de Dilma Rousseff. Este lunes, el parqué brasileño operaba prácticamente plano.
Aunque Barbosa podría ser el hombre que trajese la estabilidad económica a Brasil, los inversores no están muy contentos con el cambio de manos de la cartera de Hacienda, según recoge Bloomberg.
Y para muestra, la caída del 2,6% del real brasileño en el mercado de divisas y la de más del 3% de las acciones que componen la Bolsa de Sao Paulo. La situación choca con la llegada de Joaquim Levy, ‘manostijeras’, al Ministro, que fue recibido como la solución a la crisis del país.
Los mercados aplaudieron la llegada de Levy, precisamente, por su gusto por reducir los presupuestos, cosa que Barbosa podría no replicar pues aunque es respetado por sus habilidades tecnocráticas no es conocido, precisamente, por recortar gastos. De hecho, durante su investidura sugirió la concesión de subvenciones a algunos sectores.
Además, Barbosa llega un momento aún más complicado que cuando Levy accedió al cargo. La economía brasileña se encuentra en una profunda crisis económica y la popularidad de la presidenta Dilma Rousseff está por los suelos, no solo por su supuesta implicación con la corrupción de la petrolera estatal Petróleos Brasileños (Petrobras) sino también por el juicio político al que podría ser sometida por las irregularidades fiscales de 2014.
Es lógico que los inversores se pregunten qué podrá hacer Barbosa ahora, si Levy no pudo conseguirlo cuando la situación estaba algo mejor que ahora. Que el Gobierno se haya centrado en salir airoso del escándalo de Petrobras mucho ha tenido que ver con esto, pues el Partido de los Trabajadores (PT), al que pertenecen Rousseff y Silva, no recibía los apoyos suficientes para recortar tal y como solicitaba Levy.
Barbosa, que fuera hasta hace bien poco ministro de Planificación, es economista y durante el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, ocupó diversos puestos de responsabilidad como la Secretaria Ejecutiva de Hacienda y también la cartera de Planificación. Le sustituirá ahora el ministro de Contraloría General de la Unión, Vladimir Simão.
