Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), defendió hoy la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) que busca aprobar el Gobierno de Michel Temer en Brasil, tras reunirse en Washington con el ministro de Finanzas brasileño, Henrique Meirelles. Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), defendió hoy la Propuesta de Enmienda Constitucional (PEC) que busca aprobar el Gobierno de Michel Temer en Brasil, tras reunirse en Washington con el ministro de Finanzas brasileño, Henrique Meirelles.
«Estoy satisfecha de haber encontrado a Meirelles. Discutimos los planes de las autoridades brasileñas de reformas para el sector fiscal y la propuesta de enmienda constitucional para frenar el crecimiento del gasto público, así como las planeadas reformas en seguridad social», dijo Lagarde después de encontrarse con Meirelles en el marco del encuentro anual del FMI.
«Estoy animada por el foco y dirección de esas reformas. Aprobándolas en un período razonable de tiempo, eso ayudaría a fortalecer la credibilidad de la política macroeconómica brasileña, generar confianza en la economía y anclar el retorno al crecimiento fuerte, inclusivo y sustentable en Brasil», agregó.
La PEC busca aprobar un techo para el gasto público en Brasil durante los próximos 20 años. El presidente conservador Michel Temer, del centroderechista Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), está esforzándose para lograr su aprobación parlamentaria.
Temer fue incluso hoy a la casa de Rogério Rosso, líder del aliado Partido Social Democrático (PSD), para discutir la propuesta con él y con Rodrigo Maia, presidente de la Cámara de Diputados del también aliado Demócratas (DEM).
La PEC, que se votará esta semana, es caracterizada por la administración Temer como el primer paso para superar la crisis financiera en la que se encuentra sumido el país.
Temer asumió formalmente la presidencia de Brasil el 31 de agosto, después de que la destitución de Rousseff pusiera fin a más de 13 años de Gobierno del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT).
La primera economía de América Latina cerrará 2016 por segundo año consecutivo con una recesión de más del tres por ciento, después de haber tenido durante años un constante crecimiento económico.
