La jienense Amparo Sánchez, nacida en Alcala la Real, una de las ciudades españolas donde más se respetan las músicas del mundo, ha dejado ya atrás aquellos años en los que triunfó al frente de Amparanoia, su vieja, y muy recordada banda. La jienense Amparo Sánchez, nacida en Alcala la Real, una de las ciudades españolas donde más se respetan las músicas del mundo, ha dejado ya atrás aquellos años en los que triunfó al frente de Amparanoia, su vieja, y muy recordada banda.
A estas alturas, después de unos cuántos álbumes en solitario, y seis años de carrera al frente de su proyecto propio, Sánchez se ha conseguido abrirse hueco en los circuitos internacionales del género que practica.
Lo demuestra su nuevo álbum, ‘El Espíritu del Sol’ que, muy poco después de ser publicado este mismo mes, se ha situado en el puesto número nueve de las listas francesas del estilo.
Lamentablemente, en España, un país en el que han nacido algunos de los mejores exponentes del mezcla de folklore y espíritu contemporáneo, la presencia de este tipo de discos en los medios es bastante escasa y su repercusión está en consonancia.
Por suerte para Sánchez, desde los tiempos en los que compartía escenario con Manu Chao, todavía un cómplice y un amigo con el que colabora, hasta hoy mismo su nutrida e irreductible base de fans no ha menguado.
Tampoco la calidad de la música que ofrece, como vuelve a demostrar en este nuevo álbum en el que intervienen otra vez como productores unos verdaderos magos del sonido agreste pero moderno: los estadounidenses Calexico.
