Estos recursos, según la empresa, le permitirán mejorar sus costes de financiamiento en el marco del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos, un recurso al que la aerolínea se acogió en mayo de 2020 como consecuencia de la pandemia.
Latam ha explicado que tras la recepción de diversas ofertas de inversores para el tramo B, los directivos han aprobado por unanimidad la propuesta liderada por Oaktree Capital y Apollo Management, entre otros fondos de inversión.
«Hemos recibido varias ofertas de inversionistas que nos han manifestado su interés de acompañarnos en nuestro proceso. Esta propuesta nos permitirá acceder a mejores condiciones de financiamiento, generando importantes ahorros de costos y beneficiando a nuestros acreedores y a Latam», ha señalado el vicepresidente financiero de Latam, Ramiro Alfonsín.
De esta forma, el financiamiento DIP quedaría conformado en 3.200 millones de dólares (2.748 millones de euros) divididos en tres tramos. En concreto, son 1.300 millones de dólares (1.116 millones de euros) del tramo A, 750 millones de dólares (644 millones de euros) del tramo B y 1.150 millones de dólares (987 millones de euros) del tramo C.
La incorporación de los fondos comprometidos del tramo B del financiamiento DIP está sujeta a la aprobación de la Corte de Nueva York encargada de supervisar el proceso de reorganización de deuda de la compañía.
En mayo de 2020 Latam Airlines y sus filiales en Chile, Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Perú y Brasil se acogieron de forma voluntaria al Capítulo 11, tras las graves consecuencias de la pandemia de coronavirus y su impacto en la industria aérea.
A través de este proceso, la empresa buscar redimensionar sus operaciones y adecuarlas al nuevo entorno de demanda y reorganizar sus balances financieros.