Al analizar datos reunidos en 122 kilómetros cuadrados con la ayuda de la tecnología láser Lidar, los científicos detectaron una gran ciudad, la que llamaron Valeriana, que ocupaba unos 16,6 kilómetros cuadrados y tenía dos centros, separados entre sí por unos dos kilómetros.
El más grande de los sectores de Valeriana tiene todos los rasgos de una capital política del período clásico de los mayas: varias plazas unidas entre sí por una calzada ancha, pirámides de culto, un recinto para jugar a la pelota y un embalse, señalaron los investigadores.
En la ciudad se encuentra un conjunto arquitectónico característico de las poblaciones que existieron hasta el año 150 de nuestra era.