El real siguió depreciándose este martes frente al dólar y superó por primera vez los 4,25 reales por billete verde, en un movimiento atribuido a declaraciones del ministro brasileño de Economía, Paulo Guedes, en las que daba por sentado que esa tendencia persistirá.
Hacia las 10H15 (13H15 GMT) la escalada proseguía y la divisa brasileña se cotizaba a 4,2660 reales, con una caída de 0,92% respecto al cierre de la víspera.
El mínimo histórico anterior del real fue en plena recesión económica y crisis política en Brasil, en septiembre de 2015, cuando el dólar llegó a negociarse a 4,2487 reales.
En lo que va de noviembre, el real se ha depreciado más de 6% frente al dólar, en un contexto de tensiones comerciales internacionales y de incertidumbres sobre el avance de las reformas promercado preconizadas por el gobierno de Jair Bolsonaro.
El jueves, el real se debilitó por el anuncio de un déficit de cuenta corriente superior al esperado y el viernes la tendencia se acentuó, según analistas, por declaraciones de Guedes, quien afirmó en Washington que la fortaleza del billete verde no le causaba preocupación alguna.
«Brasil es ahora un país con tasas más bajas y cambio más elevado. Ese es el movimiento», afirmó, admitiendo igualmente que el déficit de transacciones corrientes podría seguir aumentando, aunque compensado con mayor ingreso de inversiones gracias a una incipiente recuperación económica.
«Parece que el mercado se está asustando con lo que dijo Guedes, que tendremos que convivir con tasas bajas y un dólar alto», señaló Alex Agostini, de la consultora Austin Rating.
La fortaleza del dólar, potencialmente inflacionaria, podría afectar la perspectiva de una nueva reducción en diciembre de la tasa de referencia, actualmente en un mínimo histórico de 5,5%.
El Banco Central de Brasil indicó en octubre, tras recortar por tercera vez seguida la tasa, que veía espacio para una nueva bajada de 0,5 puntos porcentuales en su última reunión del año.
La última estimación del mercado publicada este lunes por la encuesta Focus prevé una inflación de 3,46% este año, en alza respecto al 3,3% de hace una semana.
Aun así, se halla por debajo del centro de la meta del BCB, de 4,25% (con un margen de 1,5 puntos porcentuales hacia arriba o hacia abajo).