Un acuerdo germano-boliviano para la extracción de litio en Bolivia que se canceló de manera inesperada hace dos semanas iba a seguir adelante pero en otra región, dijo el ex presidente de Bolivia Evo Morales.
«Ya no iba a depender de Potosí. Ese era el plan que teníamos, pero ahora se ha frustrado eso», explicó Morales en una entrevista con dpa en Ciudad de México.
La cancelación tomó por sorpresa a la empresa alemana ACI Systems y ocurrió apenas unos días antes de que Morales renunciara al cargo el 10 de noviembre y se exiliara en México, después de semanas de protestas por un supuesto fraude electoral para asegurarse un cuarto mandato.
El ex presidente explicó que pequeños grupos de la región de Potosí, con asesores chilenos, se oponían al proyecto, por lo que su gobierno y líderes regionales ya estaban trabajando en la creación de una nueva región autonómica para continuarlo con la misma empresa.
«Los alcaldes de la región, los movimientos sociales dijeron: vamos a hacer nuestra autonomía regional para continuar con el proyecto», explicó.
«El plan que teníamos era que este fin de año tuvieran su autonomía regional y con la región avanzar en el mismo proyecto de la industrialización del litio», dijo. «Ya estaban con sus estatutos autonómicos regionales. Ya estaba muy avanzado».
La «joint-venture» había sido acordada en diciembre en Berlín entre la empresa estatal boliviana YLB y ACI Systems para obtener litio del salar de Uyuni, donde se presume que se encuentran las mayores reservas de litio del mundo.
No está claro qué ocurrirá ahora con el proyecto tras la salida de Morales del poder. En Bolivia, donde simpatizantes de Morales encabezan protestas contra lo que llaman un «golpe de Estado», hay ahora un gobierno de transición que debe facilitar la convocatoria a nuevas elecciones.
El litio se usa entre otras cosas para la producción de baterías para automóviles eléctricos. El Ministerio de Economía de Alemania dirigido por Peter Altmaier había expresado «sorpresa y pesar» por la cancelación.