Aunque concebido como un foro ministerial, la asistencia de los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), Gustavo Petro (Colombia) y Gabriel Boric (Chile) eleva la dimensión política del evento que se celebra el 13 de mayo en Pekín. Sus agendas coinciden en la promoción del multilateralismo, la reforma del orden internacional y la necesidad de que Latinoamérica se exprese con una voz común ante las potencias globales.
El Foro China-Celac se consolida como una plataforma estratégica para discutir el rumbo de las relaciones con el gigante asiático, en un contexto geopolítico marcado por la competencia entre Estados Unidos y China, y por las tensiones en el sistema multilateral.
Lula, Petro y Boric: protagonismo progresista en la agenda regional
El presidente brasileño Lula da Silva aprovechará su visita de Estado a China para presentar su visión de América Latina como una «zona de paz», además de impulsar su propuesta de una candidatura femenina para la Secretaría General de la ONU, ya expuesta en la pasada Cumbre de la Celac en Honduras.
Gustavo Petro, en calidad de presidente pro tempore de la Celac, llevará un plan de trabajo que busca estrechar los lazos entre el bloque y China mediante mecanismos de cooperación estructural. La expectativa de Colombia es cerrar la reunión con una declaración conjunta que refleje su visión como articulador del Sur Global.
Por su parte, Gabriel Boric reforzará el perfil autónomo y confiable de Chile al mantener encuentros con empresarios chinos y con el propio Xi Jinping, reafirmando la estrategia comercial y diplomática de su Gobierno en Asia.
La presencia de Lula, Petro y Boric otorga al foro un valor político que trasciende su naturaleza ministerial y proyecta una imagen de coordinación progresista latinoamericana
Ausencias notables y diferentes enfoques ante China
No todos los líderes regionales estarán presentes. Javier Milei (Argentina), Santiago Peña (Paraguay) y Yamandú Orsi (Uruguay) delegarán en ministros o embajadores. En el caso de Argentina, las críticas a la Celac por su supuesta falta de pluralismo han tensionado su vínculo con el bloque, mientras se fortalece la alianza con EEUU e Israel.
México, representado por el canciller Juan Ramón de la Fuente, no contará con la presencia de Claudia Sheinbaum, lo que marca distancia frente a la presencia de los presidentes progresistas. Mientras tanto, países como Nicaragua, Bolivia y Honduras enviarán delegaciones de alto nivel, con discursos alineados a una diplomacia de cercanía con Pekín.
Las diferentes presencias reflejan la pluralidad de visiones latinoamericanas sobre cómo relacionarse con China, sin que ello implique una ruptura regional
El papel estratégico de China en América Latina
Para China, este foro representa una oportunidad clave para consolidar su influencia en América Latina y profundizar su estrategia de cooperación Sur-Sur. Para los países latinoamericanos, el reto sigue siendo diseñar una estrategia común que permita aprovechar las oportunidades sin comprometer su autonomía diplomática.
En ese contexto, incluso países con posiciones más técnicas, como Uruguay, ven en China una puerta hacia la modernización y diversificación de sus vínculos económicos, sin renunciar a la vocación integradora del Mercosur.