El ministro de Salud, Francisco Alabi, ha indicado que esta ley supone una medida más en la estrategia para frenar la COVID-19, «en cumplimiento de las recomendaciones internacionales por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS)».
El decreto suspende durante 90 días toda concentración de personas en un acto, de carácter público o privado, entre ellos conciertos, mítines, eventos deportivos o fiestas patronales, ha detallado Alabi, recoge ‘La Prensa Gráfica’.
No obstante, la medida no contempla los eventos sociales como bodas, bautizos, fiestas o misas, donde sí que será obligatorio llevar mascarilla, se ha dispuesto.
El incumplimiento de estas disposiciones supondrá sanciones penales o financieras.
«Le pedimos a los salvadoreños el cumplimiento de las medidas para poder disminuir esa posibilidad de transmisión de persona a persona», ha pedido Alabi.
El propio Bukele ha escrito en su cuenta de la red social Twitter ha indicado que «los alcaldes que realicen fiestas patronales, carnavales, mítines o eventos masivos, en los próximos tres meses, serán sancionados con 100 salarios mínimos y procesados penalmente por el delito de desobediencia de particulares».
Las autoridades sanitarias salvadoreñas han contabilizado hasta el momento 81.644 casos de coronavirus, de los cuales 2.457 pacientes han muerto como consecuencia de la enfermedad.