El pleno de la Asamblea no logró arrancar el domingo por la ausencia de la gran mayoría de los legisladores, entre ellos los diputados de Unión por la Esperanza (Unes), aliados del expresidente ecuatoriano Rafael Correa y que suponen el grupo más numeroso.
«Mientras nosotros no paramos de trabajar todos los días y desde cualquier lugar, la Asamblea se queda sin quórum para tratar un importante proyecto de ley para fortalecer la lucha contra la inseguridad», ha lamentado Lasso, en relación a una reforma que el Ejecutivo reclama. «Se fueron de vacaciones hasta el 3 de enero. ¿Y la seguridad de los ecuatorianos?», ha añadido en Twitter.
Para el Gobierno de Ecuador, que también se ha pronunciado en otro comunicado sobre la polémica, la parálisis de la Asamblea «no sólo denota indeferencia e indolencia», sino que también «desacata» decisiones «judiciales y constitucionales».
Las autoridades ecuatorianas han adoptado en estos últimos meses medidas extraordinarias para combatir la creciente ola de violencia, con estados de excepción en varias regiones, entre ellas Guayaquil, que no han logrado contener la escalada de las tensiones.