El Congreso de los Diputados de Argentina ha aprobado este miércoles el proyecto de reestructuración del pago de la deuda a las instituciones extranjeras casi por unanimidad, con 224 votos a favor y tan sólo dos en contra. El presidente de Argentina, Alberto Fernández, ha agradecido al resto de bloques y fuerzas políticas el apoyo y ha defendido que este proyecto de ley, el cual será ratificado el próximo miércoles en Senado, es la «herramienta fundamental» para compaginar los compromisos internacionales del Estado con el cuidado de «quienes más padecen».
Antes de la votación, Gobierno y oposición han estado durante casi cinco horas recriminándose quién era el verdadero responsable de que se haya tenido que llegar a esta situación. Así, la oposición ha apuntado que, además de la gestión del anterior Gobierno de Mauricio Macri, había que incluir los bonos de 2005 y 2010 que se emitieron bajo sendos mandatos del matrimonio Kirchner.
«Estamos al lado del Gobierno en lo que necesite en materia de refinanciación de la deuda, para que no quepan dudas, pero necesitamos saber cuáles van a ser los motores del desarrollo económico, cómo vamos a exportar», ha puntualizado el jefe del bloque de la oposición Juntos por el Cambio, Mario Negri, tal y como ha informado el periódico local ‘La Nación’.
Por su parte, el jefe del bloque del Gobierno Frente de Todos, Máximo Kirchner, ha aplaudido el apoyo de la oposición, pero al mismo tiempo no ha dejado pasar la oportunidad de responsabilizar a Mauricio Macri por este endeudamiento, que está en torno a los 310.000 millones de euros, pues «encima tuvo el desparpajo de echarle la culpa a su propio partido político», ha recordado, haciendo referencia a unas declaraciones que el anterior presidente argentino emitió en una reunión informal con miembros del partido Propuesta Republicana.
