«Después de la presentación del nuevo documento modificado, Jair Bolsonaro estuvo de acuerdo en los términos ajustados y convocó una reunión con los comandantes de las fuerzas militares para presentar la minuta y presionarlos para que se sumaran al golpe de Estado», dice el documento de la Policía Federal citado por el juez del Tribunal Supremo Federal, Alexandre de Moraes, para autorizar la operación policial de este jueves.
Según estos documentos, el plan inicial del entorno de Bolsonaro tras perder las elecciones de octubre de 2022 pasaba por detener a dos jueces del Supremo (el propio Alexandre de Moraes y Gilmar Mendes) y al presidente del Senado, Rodrigo Pacheco.
Bolsonaro habría pedido quitar el nombre de Mendes y de Pacheco, pero no el de Moraes, así como tampoco el fragmento que preveía la realización de nuevas elecciones.
Las investigaciones también descubrieron que militares en activo presionaron a los que eran contrarios al golpe para intentar convencerlos.
Además, el exayudante de Bolsonaro Mauro Cid recibió una petición de 100.000 reales (más de 20.000 dólares) para ayudar en la organización de actos golpistas.
La operación lanzada este jueves por la Policía Federal ya detuvo a tres asesores muy próximos de Bolsonaro y determinó que el expresidente entregue su pasaporte y no tenga contacto con el resto de investigados.
