La medida, comunicada este viernes por la Secretaría Ejecutiva, marca un nuevo episodio de tensión en el eje político latinoamericano.
Ruptura con la tradición bolivariana
La suspensión de Bolivia se fundamenta en lo que el organismo calificó como una “conducta antibolivariana, antilatinoamericana y proimperialista” del próximo Ejecutivo. Según el comunicado firmado por el secretario ejecutivo, Rander Peña, la decisión fue consensuada entre los gobiernos miembros para preservar los principios fundacionales de integración, soberanía y solidaridad regional.
El anuncio llega después de que Rodrigo Paz confirmara que los presidentes de Cuba, Nicaragua y Venezuela no serán invitados a su toma de posesión el 8 de noviembre, alegando “una clara diferencia en los criterios democráticos” entre su Gobierno y los de esos países.
La suspensión se mantendrá mientras se evalúan las condiciones políticas en Bolivia, con el fin de proteger los principios fundacionales de la ALBA
La Secretaría del bloque aclaró que la medida no rompe los lazos de cooperación con el pueblo boliviano, destacando los avances conjuntos en educación, salud y desarrollo desde la adhesión de Bolivia al mecanismo.
Contexto y tensiones previas en la región
La decisión de ALBA se produce en un momento de redefinición política en Sudamérica. En los últimos años, varios gobiernos han replanteado su relación con el bloque fundado en 2004 por Hugo Chávez y Fidel Castro, especialmente ante los cambios de signo político en países como Ecuador y ahora Bolivia.
El distanciamiento de Bolivia podría anticipar un reacomodo regional en torno a nuevos polos de integración económica y política
Fuentes diplomáticas apuntan a que los países miembros del ALBA —Cuba, Venezuela, Nicaragua, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Dominica, Granada, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves— buscarán mantener canales de diálogo con La Paz, aunque sin un marco institucional activo mientras dure la suspensión.
La organización reiteró su apoyo al pueblo boliviano y su compromiso de seguir colaborando “en defensa de sus derechos, su desarrollo social y económico”.
Principales miembros del ALBA-TCP
| País miembro | Año de adhesión | Situación actual |
|---|---|---|
| Venezuela | 2004 | Activo |
| Cuba | 2004 | Activo |
| Nicaragua | 2007 | Activo |
| Bolivia | 2006 | Suspendido |
| San Vicente y las Granadinas | 2009 | Activo |
| Dominica | 2008 | Activo |
| Granada | 2014 | Activo |
| Santa Lucía | 2013 | Activo |
| Antigua y Barbuda | 2009 | Activo |
| San Cristóbal y Nieves | 2014 | Activo |
Un nuevo escenario político para Bolivia
La suspensión supone un giro en la política exterior boliviana tras casi dos décadas de cooperación con el bloque. El presidente electo Rodrigo Paz, de orientación liberal-centrista, ha señalado su intención de priorizar las relaciones con la Comunidad Andina, el Mercosur y la Unión Europea, distanciándose de los ejes ideológicos tradicionales del ALBA.
El Gobierno de Paz busca proyectar una imagen de apertura económica y pragmatismo diplomático tras años de alineamiento con Caracas y La Habana
El Ministerio de Relaciones Exteriores boliviano no ha respondido de momento al comunicado del ALBA, aunque fuentes cercanas al equipo de transición sostienen que “Bolivia no necesita intermediarios ideológicos para cooperar con sus vecinos”.
La suspensión, que permanecerá vigente hasta una nueva evaluación política, marca el inicio de una etapa de redefinición diplomática tanto para el bloque como para Bolivia, uno de los socios fundadores más activos en la primera década del siglo.



