La actividad industrial argentina mostró en junio un retroceso mensual del 1,2% después de dos meses de recuperación, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
A pesar de esta caída en términos mensuales, el sector mantiene una tendencia positiva en comparación con junio de 2024, con un crecimiento del 9,3%, acumulando siete meses consecutivos de avance en la producción manufacturera, aunque partiendo de una base baja.
Este crecimiento interanual refleja una recuperación, pero la contracción mensual pone en evidencia la volatilidad del sector
La recuperación interanual y la evolución semestral
El informe del Indec señala que, en el primer semestre de 2025, la actividad industrial acumuló un crecimiento del 7,1% respecto a igual período de 2024. Esta cifra confirma la recuperación parcial tras la caída del 9,4% que sufrió la industria el año pasado debido al fuerte ajuste económico implementado por el Gobierno de Milei.
La mejora es clara, pero no suficiente para recuperar los niveles previos a la crisis
De las 16 ramas industriales medidas, 15 mostraron mejoras interanuales en junio. Destacaron la producción de autos, con un crecimiento del 29%, materiales para la construcción (19,7%) y maquinaria y equipo (17,3%). Solo el sector de productos metálicos registró un retroceso del 5,8%.
Esta disparidad refleja una recuperación heterogénea en los distintos segmentos industriales
Estancamiento del consumo y preocupaciones laborales
A pesar del crecimiento acumulado, el sector manufacturero enfrenta un estancamiento en el consumo interno, acompañado por un aumento en las importaciones que compite con la producción nacional.
La Unión Industrial Argentina (UIA) expresó su preocupación por el amesetamiento que la actividad industrial viene mostrando en los últimos cinco meses
La UIA alertó sobre la pérdida promedio de 1.500 empleos mensuales en el último trimestre, un dato que refleja la fragilidad del sector frente a la desaceleración económica.
Perspectivas para el sector industrial en Argentina
Si bien consultores privados mantienen expectativas de recuperación para 2025, la evolución sectorial sigue siendo incierta y vulnerable a factores como la inflación, la demanda interna y la presión de las importaciones.