La contracción del sector estuvo principalmente motivada por la evolución del negocio de Vida, así como por el fuerte retroceso de esta línea de negocio en Brasil, México, Chile y Colombia, además del impacto de la depreciación de sus monedas locales.
Como consecuencia, la participación del mercado asegurador latinoamericano en el total mundial volvió a reducirse en el último año, según el estudio, para situarse en el 2,1%.
Las primas del segmento de los seguros experimentaron un retroceso del 18,7% medidas en dólares, frente al crecimiento del 5,1% registrado en 2019, mientras que las primas de los seguros de No Vida tuvieron una caída del 6,1%, frente a la contracción del 1,1% observada en 2019.
Estos retrocesos afectaron prácticamente a todos los grandes mercados de la región de América Latina, siendo el mercado chileno el que más cayó (-15,3%), seguido de Ecuador (-5,3%), México (-3,1%), Perú (-2,4%) y Brasil (-2%).
No obstante, la región también experimentó algunas excepciones positivas, como fue el crecimiento del Puerto Rico (+13,7%) impulsado por el buen comportamiento de los seguros de salud.
El resultado neto agregado del mercado asegurador en la región se situó en 9.316 millones de dólares en 2020, lo que supone un descenso del 30,1% frente al año anterior.