En concreto, la OIT estima que solo el 46,8% de las mujeres americanas tendrá un trabajo este año. En este contexto, la organización ha señalado que el continente registró la mayor pérdida de empleos femeninos a causa de la pandemia, con el 9,4% de empleos perdidos, frente al descenso del 7% en el caso de los hombres.
Al retroceso americano le han seguido los Estado Árabes (-4,1%) y Asia y el Pacífico (-3,8%) para las mujeres, frente al -1,8% y el -2,9% para los hombres, respectivamente. En Europa y Asia Central la pandemia redujo el empleo femenino en un -2,5% y un -1,9%, respectivamente; mientras que en África disminuyó en -1,9%.
El texto explica que la epidemia ha supuesto un retroceso de 15 años en términos de empleo femenino, que hasta la llegada del virus había registrado unos mejores datos gracias a la mejora de las oportunidades educativas para las mujeres, al aumento de disponibilidad de empleos normales en el sector de los servicios, a la migración de zonas rurales urbanas y al descenso de las tasas de fertilidad.
A nivel global, la OIT estima que en 2021 menos de la mitad de mujeres tendrán un empleo, frente al 68,8% de ocupación, según ha revelado la institución este lunes en un informe.
Según el organismo, solo el 43,2% de las mujeres en edad de trabajar tendrá un empleo este año. De este modo, la organización ha advertido del incremento desproporcionado en términos de desigualdad y su poco probable cambio en el futuro cercano.
De este modo, la creación de empleo femenino durante este año no servirá para compensar la pérdida sufrida por la pandemia.