«Fue un accidente lo que sucedió, descartamos que se haya tratado de algo intencionado», dijo el mandatario en conferencia de prensa.
El incendio ocurrió tras una explosión en un oleoducto submarino a casi 80 metros de profundidad del yacimiento gigante Ku Maloob Zaap, conocido por sus siglas KMZ, en aguas someras frente a las cotas del estado petrolero de Campeche (sureste), que genera alrededor del 40 por ciento de toda la producción mexicana, de 1,68 millones de barriles diarios de crudo.
«Los primeros reportes que tenemos tienen que ver con una fuga de gas y de nitrógeno en un gasoducto, que con las lluvias, tormentas y descargas eléctricas, explotó; afortunadamente no hubo pérdidas de vidas humanas», detalló López Obrador.
El enorme «ojo de fuego marino» comenzó al amanecer del viernes y fue controlado cerca del mediodía por tres embarcaciones que lanzaron chorros de material contra incendios, sin pérdidas de vidas humanas, según informó Pemex.
La petrolera estatal reportó una fuga de gas un ducto submarino de 12 pulgadas y la presencia de fuego en el mar a 150 metros de la plataforma satélite KU-C, localizada en la Sonda de Campeche del yacimiento gigante KMZ, de la filial «Exploración y Producción», pero no explicó las causas.