El Ministerio de Salud de Bolivia ha anunciado este lunes que el país cierra el mes de agosto habiendo superado los 5.000 fallecidos por coronavirus, mientras que el número de casos acumulados es ya de 166.598, al sumar en el último día 630 contagios.
En total, las autoridades sanitarias han confirmado la muerte de 5.027 personas a causa del nuevo coronavirus, después de las 66 víctimas mortales que han sido contabilizadas en las últimas 24 horas.
La cifra de personas recuperadas asciende a 60.408, mientras 51.163 casos continúan activos y otros 3.181 están siendo estudiados, ante la posibilidad de que se puedan unir en las próximas horas al balance global de contagios.
El departamento de Santa Cruz, en vísperas de asumir nuevas medidas más laxas con respecto a las del confinamiento, ha sumado 152 positivos, lo que supone un total de 40.445 casos acumulados.
Por su parte, La Paz, la otra región más afectada, ha sumado 101 nuevos positivos, la cifra total es de 30.999, así como 22 fallecidos.
El municipio de La Paz también comenzará a partir de esta martes una nueva fase de la desescalada, comenzando con la ampliación de los horarios laborales y del transporte público, aunque continúan las restricciones de movimiento durante el fin de semana.
«En el municipio de La Paz todavía no van a poder funcionar actividades recreativas ni restaurantes y están prohibidas las concentraciones de personas», ha recalcado el alcalde, Luis Revilla.
«Simplemente se está ampliando el horario de trabajo a ocho horas» como el del «funcionamiento del transporte público», ha explicado.