La alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, ha advertido este miércoles de que la ciudad debe prepararse para afrontar «una segunda ola» de contagios de coronavirus.
Viteri, que ha asegurado que Guayaquil reforzará la atención médica para evitar «que el sistema sanitario colapse», ha reiterado que el cantón permanecerá con toque de queda y jornada laboral suspendida a partir del 4 de mayo, fecha en la que el Gobierno ha dispuesto la fase de transición del aislamiento al distanciamiento social.
El anuncio de la alcaldesa ha comportado que la circulación de personas aumente en las calles de la ciudad, además de aglomeraciones en el transporte público. Además, en zonas populares se ha incrementado la presencia de comerciantes informales.
«Por eso tenemos que prepararnos para una segunda ola de la enfermedad, aun con las medidas de restricción, porque la gente sigue saliendo a las calles para sobrevivir, vendiendo lo que pueda», ha dicho Viteri, según ha informado el diario local ‘El Comercio’.
En este contexto, ha explicado que Guayaquil ha contratado 500 médicos, que 35 clínicas móviles recorren los barrios de la ciudad y que ha adecuado la atención en ocho hospitales de día, además de establecer tres centros de atención intermedia para descongestionar los hospitales del Ministerio de Salud y el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.
Guayaquil es el epicentro del coronavirus en Ecuador. Un total de 24.258 personas están contagiadas en el país latinoamericano, mientras que los muertos alcanzan los 871, según el Ministerio de Salud ecuatoriano.
