El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro ha reiterado en las últimas horas su oferta de diálogo a toda la oposición para pactar una estrategia nacional contra la pandemia de coronavirus, asegurando que, por parte del Gobierno, la mesa de conversaciones podría estar lista en 48 horas.
«Yo lo dije ayer y lo ratifico hoy (…) Estoy listo para el diálogo», dijo Maduro en la comparecencia que hizo desde el Palacio de Miraflores después de anunciarse su imputación en Estados Unidos por narcoterrorismo.
Maduro reveló que su vicepresidente de Comunicación, Jorge Rodríguez, ha enviado «mensajes personalizados a todos los dirigentes de los partidos políticos de la oposición» para recalcarles la oferta de diálogo.
En la misma comparecencia ordenó a Rodríguez que «haga contacto con el nuncio apostólico del Papa Francisco en Venezuela» para «pedir prestada la Nunciatura Apostólica para promover en las próximas 48 horas un encuentro político por la paz para atender el tema del coronavirus».
Maduro ya manifestó el miércoles que estaba «listo» para «hablar con toda la oposición, con parte de ella o con quien quiera hablar para llegar a acuerdos que favorezcan y protejan a nuestro pueblo por encima del sectarismo, la politiquería y los orgullos».
El autoproclamado «presidente encargado» de Venezuela, Juan Guaidó, le contestó que él estaba dispuesto a hacer «todo» lo necesario para conseguir ayuda internacional para el país contra el coronavirus, pero descartó un nuevo diálogo.
En cambio, el otrora líder opositor Henrique Capriles ha abogado por sentarse a la mesa de conversaciones con el Gobierno de Maduro para combatir juntos la pandemia. «Estoy de acuerdo», dijo Maduro el jueves, animando a Capriles a «asumir el liderazgo» opositor, aunque también mencionó a Manuel Rosales y Henry Ramos Allup.
El dirigente ‘chavista’ insistió en que él está dispuesto a hablar con la oposición «en las circunstancias que sea», incluso si «el imperialismo ataca» y si intentan matarlo, según declaró. «Quiero diálogo en las circunstancias que sea y hoy más que nunca para proteger a nuestro país», aseveró, según informa VTV.
Maduro y la oposición venezolana han intentado numerosos diálogos en los últimos años para pactar una solución a la crisis política, económica y humanitaria que sufre el país, pero todos han fracasado.
Venezuela, con un muerto y más de cien casos confirmado de coronavirus, está en «cuarentena social», si bien Guaidó ha alertado de que el país no está en condiciones de enfrentarse a una pandemia, precisamente por la debilidad que arrastra.
PASTRANA, DE INTERMEDIARIO
Maduro también aceptó el guante lanzado el miércoles por el ex presidente colombiano Andrés Pastrana, una de las voces regionales más críticas con el presidente venezolano, que se ha ofrecido a viajar a Caracas para reunirse con él y diseñar un plan de gestión de la frontera ante el coronavirus. «Iría hoy mismo a Venezuela y hablaría con Maduro», afirmó.
«Si se abre una pequeña ventana, estoy dispuesto. Que haya que hablar con quién haya que hablar en Colombia para tratar el tema de la frontera para frenar la propagación del Covid-19», le contestó Maduro.
El Gobierno de Iván Duque ha ordenado el cierre de la frontera con Venezuela, algo que ha suscitado una queja formal de Maduro a la ONU, en el marco de las medidas adoptadas contra el coronavirus.
Aunque Duque busca frenar el contagio, Maduro considera que el cierre de los cruces legales fomentará el uso de los ilegales, conocidos coloquialmente como ‘trochas’, donde no hay ningún control sanitario.
Las relaciones entre Bogotá y Caracas son tensas desde hace años debido a la crisis política, económica y humanitaria que sufre Venezuela y que ha tenido un fuerte impacto en el país vecino, hacia donde ha expulsado más de 1,7 millones de personas.
