El Ministerio de Salud de México ha informado este lunes de que se ha superado la barrera de las 53.000 muertes a causa de la enfermedad provocada por la COVID-19, lo que reafirma su posición como tercer país más mortífero, sólo superado por Estados Unidos y Brasil.
En su último parte, las autoridades han confirmado 5.558 nuevos contagios y 705 muertes más, por lo que son ya 485.836 los casos acumulados y las 53.003 las defunciones, mientras se estudia la causa de otras 2.415 sospechosas.
Pese a las cifras, el director general de Epidemiología, José Luis Alomía, ha subrayado que se ha producido una desaceleración de la pandemia en la últimas semanas, como refleja que menos de la mitad de las pruebas realizadas hayan dado positivo.
De los 485.836 casos acumulados, tan solo un 8 por ciento se mantienen activos y son ya 327.993 las personas que han logrado superar la enfermedad, cuyo epicentro en el país se sitúa en Ciudad de México, donde su alcaldesa, Claudia Sheinbaum, se encuentra en cuarentena después de que el secretario de Gobierno de la capital mexicana, José Alfonso Suárez, diera positivo por coronavirus.
Además de Ciudad de México, con 3.790 casos activos, los estados de Guanajuato, con 2.279, y Nuevo León, con 1.847, son las regiones del país donde mayor número de personas continúan intentando recuperarse de la enfermedad.