El Ministerio de Salud de México ha confirmado este jueves 25.060 defunciones y 202.951 casos acumulados de la COVID-19, tras contabilizar 736 muertes más y 6.104 nuevos positivos.
Ciudad de México y Estado de México continúan siendo las regiones que continúan llevando el mayor peso de la pandemia desde que dio inicio la crisis sanitaria en el país, aunque son los municipios de Puebla, en el estado homónimo, con casi 1.500 contagios, y León, en Guanajuato, con unos 800, quienes cuentan con más casos activos hasta el momento.
Por su parte, Iztapalapa, con 1.070, y Gustavo A. Madero, con 946, ambos en Ciudad de México, son los municipios con mayor número de fallecidos por la COVID-19.
Por su parte, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, ha salido al paso de las críticas lanzadas desde algunos sectores de los medios de comunicación que en las últimas fechas le han recriminado que vaticinara el fin de la crisis sanitaria para el 25 de junio.
López-Gatell se ha servido para ello de una grabación en la que se ha hecho un recorrido de las numerosas conferencias diarias que ha ofrecido desde el inicio de la crisis y en la que se ve cómo matiza que «sólo» se alcanzaría esta fecha «si» se respetaban fielmente las medidas de confinamiento.
«No asumimos que los comunicadores, o sus editores, o sus jefes de prensa, o los dueños de los medios de comunicación, que son quienes finalmente definen las agendas, tengan mala voluntad», ha dicho López-Gatell, quien supone que se ha tratado tan solo de «una mala interpretación de la información».
«Esperemos que esta les llegue», ha dicho el subsecretario, quien dirigiéndose a la población en general, ha pedido «paciencia», pues si bien las medidas de confinamiento pueden ser «fatigosas» y «desagradables» es la única manera de que la pandemia no se alargue «hasta octubre».
No ha sido el único desmentido de López-Gatell durante su última conferencia desde la sede del Palacio Nacional. El subsecretario ha tenido que negar que las pruebas de la COVID-19 se estuvieran realizando «sólo a privilegiados», según deslizó un miembro de la prensa allí congregado.
«No confunda la cosas, usted está hablando de que a los privilegiados se les hacen las pruebas y el criterio no es ese. No diga eso porque es difamatorio. Este Gobierno no hace eso», ha zanjado López-Gatell.
La polémica nace después de que se anunciara que además de los diputados del Congreso de México, sus colaboradores y asesores también serían sometidos durante este fin de semana a las pruebas para detectar posibles casos de coronavirus.