El ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Daniel Gollan, ha precisado este miércoles que la vacuna rusa Sputnik V contra la COVID-19 que adquirirá el Gobierno de Argentina será «voluntaria» y requerirá de un «consentimiento informado por escrito».
Gollan ha reiterado que cuando se aplique «no tendrá ningún riesgo de seguridad» y ha detallado que su uso tiene que ver con la necesidad de «salvar vidas» en el marco de la pandemia.
Hasta el momento, Argentina se encuentra en fase de negociaciones con los proyectos de AstraZeneca, Pfizer y Janssen, a los que hay que añadir Sputnik V.
En este sentido, ha señalado en una entrevista radiofónica que en diciembre «habrá una cantidad pequeña de vacunas de Pfizer y, eventualmente, la vacuna rusa». De forma paralela, ha apuntado que «en marzo estará la de AstraZeneca».
«Con el tiempo se verá qué vacunas generan la inmunidad que evita el contagio o cuáles pueden generar que quienes se contagien lo hagan de manera leve», ha dicho, según ha informado la agencia de noticias argentina Télam. Por último, ha insistido en que con una vacuna el virus «no desaparece» sino que «termina la pandemia descontrolada».
De acuerdo al Gobierno, las ofertas que han recibido cifran el precio de la vacuna entre los cinco y los diez dólares por dosis, aunque se ha anunciado que la vacunación será gratuita para los ciudadanos.
Argentina superó el martes las 32.000 muertes por coronavirus al registrar durante las últimas 24 horas 430 nuevos fallecimientos por la enfermedad, según los datos del Ministerio de Salud.
Con estas cifras, Argentina alcanzó un total de 32.052 decesos en lo que va de pandemia, mientras que, tras añadir a sus registros otros 12.145 contagios, se han detectado 1.195.276 casos.