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El Gobierno regional de Cajamarca en Perú se opone a dos nuevos proyectos mineros

Problemas para Humala

La situación entre las empresas mineras y el Gobierno regional de la ciudad peruana de Cajamarca, controlado por el partido izquierdista del Movimiento de Afirmación Social (MAS) que hasta ahora había sido aliado del presidente de Perú (Ollanta Humala), se complica cada vez más. Los mandatarios locales han frenado dos nuevos proyectos mineros en la urbe peruana, ya que, según señala un Estudio de Zonificación Económica Ecológica desarrollado en la zona, dañarían las cuencas hidrográficas de este departamento. Un hecho que no ha gustado al máximo dirigente del país. La situación entre las empresas mineras y el Gobierno regional de la ciudad peruana de Cajamarca, controlado por el partido izquierdista del Movimiento de Afirmación Social (MAS) que hasta ahora había sido aliado del presidente de Perú (Ollanta Humala), se complica cada vez más. Los mandatarios locales han frenado dos nuevos proyectos mineros en la urbe peruana, ya que, según señala un Estudio de Zonificación Económica Ecológica desarrollado en la zona, dañarían las cuencas hidrográficas de este departamento. Un hecho que no ha gustado al máximo dirigente del país.

Humala ha pedido calma frente a esta situación y ha aclarado que la intención de su Gobierno es encontrar una solución que satisfaga a todo el mundo y en la que se tenga en cuenta al medio ambiente. El líder ha aclarado que se han mantenido conversaciones con el sector minero, y este se ha mostrado dispuesto a resolver los conflictos sociales con una mentalidad propositiva.

El presidente peruano teme que si el MAS se sale con la suya, las inversiones en minería puedan verse afectadas, lo que repercutiría negativamente en la economía del país. Sobre todo si se tiene en cuenta que la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (Snmpe) ha estimado que existe el riesgo de perder la continuidad de las inversiones en Cajamarca por un valor de 9.641 millones de euros (7.015 millones de euros).

Por el momento se trata de una declaración de intenciones, ya que el estudio no ha pasado a su segunda fase, la cual supone un ordenamiento territorial antes de que se inicie su aplicación.

Así lo ha comunicado a los medios locales el vicepresidente del Gobierno regional de la ciudad peruana, César Aliaga Díaz, quien ha asegurado que debido a este informe se quieren excluir los proyectos Galeno de de la empresa china Lumina Copper S.A.C.; y Michiquillay, de la compañía británica Anglo American.

La razón que ha dado el Ejecutivo local para tomar esta decisión es que se quiere evitar poner en peligro el medioambiente de la zona, sobre todo a raíz de las protestas de los campesinos de la zona, que no admiten que este tipo de explotaciones se produzcan dentro de sus comunidades, ya que afectan a sus cultivos y a su forma de vida.

Las manifestaciones se originaron a raíz del proyecto Conga (Cajamarca) del que se encarga la minera peruana Yanacocha. Los campesinos del lugar aseguraban que esta explotación afectaba de forma negativa a sus comunidades, ya que desaparecerían importantes fuentes de agua, un bien utilizado para regar sus cosechas.

Los agricultores encontraron un gran aliado en Gobierno regional, presidido por Gregorio Santos, que les ha apoyado hasta tal punto que ha anunciado un paro en su jurisdicción para el próximo 9 de noviembre en rechazo del proyecto de Conga, al que han sido convocados los 127 alcaldes de distrito de su departamento.

Con respecto a los tres proyectos juntos (Conga, Galeno y Michiquillay), Aliaga ha asegurado que entre todos los que actualmente existen son los que suponen un mayor peligro para el medioambiente, ya que son los que más impacto producen en la zona de Jalca, en donde se recoge el acuífero que permite suministrar agua a las poblaciones cercanas.

Se trata de tres estudios que suponen unas inversiones de 2.500 millones de dólares (1.819 millones de euros) en el Galeno y 700 millones de dólares (509 millones de euros) en el de Michiquillay y de 4.800 millones de dólares (3.492 millones de euros) el de Conga.

De ahí que las presiones por parte del sector privado y del Ministerio de Medio Ambiente peruano, en representación de Humala, no se hayan hecho esperar. Estos colectivos han pedido al Gobierno regional de Cajamarca que no se otorgue todavía la certificación definitiva de su zonificación de la región, para poder seguir estableciendo concesiones mineras que beneficien a la economía del país latinoamericano.

La situación todavía se mantiene caliente y es muy pronto para saber cómo acabará todo. Pero lo que sí que está claro es que si los mandatarios regionales mantienen esta misma postura, será muy difícil que estos tres proyectos puedan seguir adelante.

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