Después de la larga batalla legal por recuperar el control de Asarco parecía que Grupo México iba a tener un poco de tranquilidad. Sin embargo, la huelga de los trabajadores de las minas de Cananea, Sombrerete y Taxto es un nuevo foco de conflictos. Desde el sindicato nacional minero han denunciado tratos entre el gobierno y la empresa que perjudican a los obreros. El presidente del Comité de Huelga, Jesús Verdugo, ha explicado a Americaeconómica.com que 2.500 operarios han secundado un paro que se alarga ya más de dos años y medio. Según el sindicalista, sus demandas se refieren a la seguridad e higiene en las instalaciones. Después de la larga batalla legal por recuperar el control de Asarco parecía que Grupo México iba a tener un poco de tranquilidad. Sin embargo, la huelga de los trabajadores de las minas de Cananea, Sombrerete y Taxto es un nuevo foco de conflictos. Desde el sindicato nacional minero han denunciado tratos entre el gobierno y la empresa que perjudican a los obreros. El presidente del Comité de Huelga, Jesús Verdugo, ha explicado a Americaeconómica.com que 2.500 operarios han secundado un paro que se alarga ya más de dos años y medio. Según el sindicalista, sus demandas se refieren a la seguridad e higiene en las instalaciones.
Verdugo ha señalado que el gobierno de Felipe Calderón tiene el propósito “de acabar con el sindicalismo mexicano”. Según el presidente del Comité de Huelga del Sindicato minero, desde el Ejecutivo quieren pisotear los derechos constitucionales de los trabajadores”. Ha argumentado que Calderón está “al servicio de un grupo de empresarios poderosos que manejan al presidente”.
Para Verdugo, el jefe del ejecutivo mexicano ha creado una “cultura de impunidad que generará un retroceso económico”.
El sindicato es un grupo de presión a Grupo México, sin embargo, la empresa no les considera como un movimiento legal que pueda ejecutar la huelga, posición que comparte el Gobierno estatal.
Desde la asociación obrera dicen llevar peleando por que le les considere legales desde abril de 2009. Además, consideran excesivos los métodos de control que han utilizado las fuerzas de seguridad.
Defienden que su única petición es incrementar las medidas de seguridad e higiene de las minas de Grupo México, con lo que los trabajadores “estarían más a gusto y se mejoraría la productividad”.
Jesús Verdugo ha añadido que desde Grupo México sólo se preocupan de 3 cosas: “producción, producción y producción, sin preocuparse por las condiciones del equipo ni de la maquinaria”.
Sobre esto, desde el gremio han argumentado que en mayo del año pasado las instalaciones de las minas de Cananea, Sombrerete y Taxco recibieron la visita de 3 inspectores especializados que contabilizaron 265 infracciones de seguridad.
Los sindicados temen un golpe contra los huelguistas aprovechando las próximas fiestas de Navidad. Sobre esto, Beltrán Reyes, Secretario del Interior, Exterior y Actas del Comité Ejecutivo Nacional, ha manifestado que existen diversos indicios que lleven a temer una acción del gobierno. Por ejemplo la declaración, hace unos días, de un vocero de la Cámara Minera de México, Camimex, de que «muy pronto se resolverán esas tres huelgas».
Reyes ha añadido que una forma es mediante el intento de terminar ilegal y arbitrariamente las relaciones laborales en esos tres centros de trabajo, «tal como lo operaron desde el gobierno contra el hermano Sindicato Mexicano de Electricistas, furtivamente, por la noche y aprovechando circunstancias de atención pública hacia eventos futbolísticos».
Para el portavoz sindical, la situación general de los trabajadores en México está muy mal. Según Verdugo, el Gobierno ha presionado a otros sectores como el de los maestros o el de los electricistas. Incluso ha llegado a vaticinar que, de seguir así, desencadenará en un estallido social en todo el país.