Un grupo de activistas de los derechos de las mujeres han aprovechado este domingo, Día Internacional de la Mujer, para pintar en el Zócalo, la plaza principal de Ciudad de México, los nombres de mujeres que han sido asesinadas desde 2016.
Solo han podido plasmar con pintura blanca los nombres de algunas de las más de 1.200 asesinadas en 2019, entre ellos los de Fátima, Sandra, Nancy, Erika, Norma, Ingrid o Guadalupe.
«Estamos llenado el Zócalo con nombres de mujeres asesinadas en el país. La idea es lograr llenar con la cantidad de nombres que podamos para no olvidar que ya no están porque nos las arrancaron y que eran mujeres con nombres, apellidos, rostro, familia, sueños», ha relatado una de las activistas en declaraciones al diario ‘La Jornada’.
«Que sea un claro mensaje de que se haga justicia. Hoy hay muchas razones para marchar. La emergencia hoy en día en México es la violencia contra las mujeres, en particular los feminicidios», ha añadido.
En México además de los actos por el 8 de Marzo también hay convocada una huelga general de mujeres para el lunes 9 de marzo. Lo que exigen al Gobierno es que haga «realmente algo para protegernos».
«Hoy es salir a protesta y luchar por el derecho a vivir libre de violencia. Mañana todas hay que sumarse para que se note nuestra ausencia y que se haga notar que este país no puede caminar sin nosotras. Si nos están matando, entonces tocará poner un alto, en un mensaje muy contundente a la sociedad», ha argumentado la activista.
LÓPEZ OBRADOR PROMETE ACABAR CON LOS FEMINICIDIOS
Mientras, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha celebrado un acto en el que ha subrayado que «la violencia en contra de las niñas y de las mujeres es incompatible con nuestros ideales». «No lo queremos ni lo vamos a permitir. En el gobierno de la Cuarta Transformación estamos ocupados todos los días en atender las causas y los efectos de la violencia», ha asegurado desde Fresnillo, estado de Zacatecas.
«Todos en contra de la discriminación, del racismo, clasismo y del machismo», ha proclamado. «Sé que vamos a reducir el índice delictivo. Se van a terminar los crímenes de odio, y los feminicidios, porque vamos a estar trabajando firmemente con este propósito», ha prometido.
En ese sentido, López Obrador ha destacado que su llegada al poder no se basó en «el apoyo de las mafias del poder o de grupos económicos o de intereses creados: llegué por la voluntad del pueblo», lo cual supone una ventaja porque «no tengo por qué estar protegiendo a nadie y se va a acabar la impunidad».
Además, López Obrador ha asegurado que su gobierno es el que más paridad de género tiene. En un principio había ocho ministros y ocho ministras y ahora son 9 hombres y siete mujeres, por lo que prometió corregir pronto ese «desequilibrio».